El Mastín Español cuenta con un temperamento incomparable y posiblemente por esto, es una de las razas más solicitadas. Es un magnífico perro de compañía y con enormes cualidades como guardián, los atributos de su raza hacen de él un animal sorprendente. Aún con su impresionante tamaño, cuenta con un corazón mucho más grande. Entérate a continuación de estas y otras características del Mastín Español, aquí en este artículo.
El Mastín Español
El mastín español o mastín leonés, como también se le conoce, es una raza canina oriunda de España, de gran valentía y lealtad, y la mejor para el cuidado del ganado que abunda en las áreas rurales. La raza histórica conformada por el mastín español se encuentra presente, desde siglos atrás, en los ambientes más rurales de España. Es reconocida por su imponente físico, y es estimada como la raza de perros de mayor tamaño del país, así como por sus dotes como centinela de terrenos y propiedades.
Hay, en cuanto a rasgos, dos variantes de mastín: el leonés o de trabajo, que es el tradicionalmente utilizado por los pastores para la guarda del ganado, y el español u oficial, variedad que se creó en el siglo XX, de mayor tamaño y con más pliegues en la piel que no lo hacen apropiado para las faenas tradicionales. Fue diseñado para su empleo a nivel doméstico y de acuerdo a los estándares que gobernaban las competencias de belleza de la segunda parte del siglo XX.
No obstante, no son estos los únicos atributos del mastín español, ya que, como les compartiremos a continuación, nos hallamos ante una raza canina extraordinaria en todos los sentidos, que puede transformarse en un magnífico animal de compañía pese a que residamos en una ciudad. Por lo que, si has considerado la adopción de un can de estas características o si ya cuentas con uno y deseas ampliar tu información, en el siguiente artículo te daremos toda la información acerca del mastín español.
Origen
Desde la antigüedad, el mastín español se ha hecho presente en haciendas y predios de la España más campesina. Persiste incertidumbre sobre sus orígenes, ya que por un lado se considera que arribó por medio de los celtas y los fenicios, y por otro se conjetura que fueron los romanos quienes lo empleaban como perro de combate, procediendo del mastín tibetano, entretanto que otros estiman que esto no es cierto y aseguran que desciende de los molosos asirios o de los dogos.
Lo que no deja de ser verdad es que ya en 1273, año en el cual se fundó la Mesta (organización de ganaderos del reino de Castilla), y como fue registrado en documentos oficiales, los mastines ya realizaban labores de pastoreo en la península ibérica. Es pues un can de mucho arraigo a las prácticas agrícolas de España, siendo el principal responsable de custodiar los campos y defenderlos de robos e intrusiones. Es más, aún en la actualidad sigue ejecutando dicha función de centinela en numerosos predios, en razón de su naturaleza protectora y a su impactante físico.
Esta misma mezcla generó que fuera muy extraño conseguir una finca que no constase con una familia de mastines españoles que resguardaran dicho terreno. El mastín español no solo ha servido de guardián, sino que igualmente ha ejecutado el rol de pastor errante por toda la nación a través de cañadas reales que lo atraviesan de norte a sur, dirigiendo al ganado y protegiéndoles de depredadores como los lobos.
Hoy en día, motivado a las modificaciones en las técnicas ganaderas y a la desaparición significativa de gran parte de los depredadores que atacaban al ganado, esta actividad ha sido casi olvidada, conformando parte de la historia de esta raza canina. En estos tiempos, la primordial función del mastín español es tanto la de guardián de terrenos como la de perro acompañante, no siendo extraño verlos pasear con sus dueños por plena ciudad, en las cuales son cada vez más frecuentes.
Temperamento
Al referirnos a una raza gigante, centinela y empleada para proteger nos hacer creer que el mastín español es un animal violento y huraño, pero nada más alejado de la realidad. Siempre que se le haya socializado de forma correcta, nos encontraremos ante un can equilibrado y muy tierno, dócil y sumamente fiel, estimándose como una de las razas caninas de mayor tranquilidad del planeta. De tal manera que, el temperamento del mastín español sobresale por estas cualidades, que lo transforman en una criatura apta para toda familia que pueda brindarle ejercicio y educación.
Aunado a ello, el mastín español es de gran inteligencia e intuición, por lo que se le puede adiestrar con gran facilidad, siempre que actuemos de forma persistente y paciente, ya que ello igualmente nos posibilitará lograr que el mastín aprenda a tener control con su fuerza y a administrar su energía de acuerdo a la situación. Ahora bien, cuando hablamos del carácter de este can es de suma importancia tener presente que hay que ser cuidadosos con lo que ellos consideran su territorio, ya que siendo una raza guardiana por naturaleza, pueden agredir a quienes ellos vean como intrusos.
Por ese mismo motivo puede que el perro ladre al escuchar ruidos, particularmente por las noches, cuando todo es silencio y los sonidos se enfatizan. Por tal motivo, podemos enfrentar problemas con los vecinos a causa de sus ladridos, pero con los métodos apropiados, y con la asistencia de profesionales en la materia si es requerido, podremos terminar con ese inconveniente y regocijarnos de la compañía de nuestra mascota canina.
Si se le da un buen entrenamiento al mastín español, éste podrá ser el compañero perfecto en cualquier lugar, pese a que es verdad que requiere mucha actividad si llegar a vivir en un apartamento pequeño; de no disponer de patio ni jardín habremos que otorgarle más horas de ejercicio, caminatas diarias y juegos para que se conserve equilibrado y sano. Al realizar esto la ausencia de suficientes metros cuadrados no será impedimento para no poder contar con un mastín español en plena ciudad.
Comportamiento
Entre las diversas características del temperamento del Mastín Español sobresale particularmente su nobleza y fidelidad. No expresa excesivas muestras de cariño, pero de ser el caso no vacilará en dar en sacrificio su propia existencia para proteger a su dueño y su familia. No es un can ladrador, pero ronca y babea de forma constante. Centinela y acompañante ejemplar, se regocija jugueteando con los niños y aprendiendo nuevos mañas. Aún así, hay que tener presente que al ser tan enormes y fuertes, pueden terminar dañando de forma involuntaria a un niño pequeño si no procedemos cuidadosamente.
Es fuerte, intrépido y autónomo, actúa con seguridad y con un temperamento ecuánime. Adicionalmente, al ser un animal de gran inteligencia, puede tomar sus propias decisiones y solucionar problemas por su cuenta. Lo que puede ser contraproducente de ello es que, a veces, puede manifestarse desobediente y terco, particularmente cuando el dueño es sumamente flexible y permisivo. Pese a que el Mastín Español puede parecernos perezoso en ocasiones, en verdad siempre muestra vigilante y alerta a lo que acontece en su derredor. De ser el caso, puede, de forma sorprende, actuar raudo y ágil pese a su gran volumen.
Educación
El entrenamiento en cuanto a la obediencia del Mastín Español puede ser, en ocasiones, una tarea dificultosa, ya que es un can de carácter obstinado y con inclinación a la “sordera selectiva”. Por ello es fundamental fijar los límites y dejarle claro quién es el que manda desde el primer instante, lo cual se simplifica sobremanera si comenzamos el adiestramiento cuando aún el perro es todavía un cachorro.
Pero a excepción de este impedimento inicial, la educación del Mastín Español es algo que satisface mucho a cualquier persona, ya que es un animal con una inteligencia muy evolucionada y con enorme capacidad de aprendizaje. Como tiende a suceder con las razas más inteligentes, es conveniente evitar la repetición de los mismos comandos muy frecuentemente a lo largo de las sesiones de entrenamiento. Cuando lo hacemos asi, es muy probable que el can se aburra y manifieste desinterés.
Para impedir inconvenientes a lo largo de su adultez, es de suma importancia comenzar el proceso de socialización del cachorro lo más pronto posible, ya que así conseguiremos que aprenda a asociarse con otros canes, niños, gatos, nuevos ambientes, etc. A causa de su enorme tamaño, este punto es trascendental en su adiestramiento, ya que no tomarlo en cuenta podría ocasionar que el perro se torne miedoso con los desconocidos, por ejemplo, y atacara como forma de defenderse.
Convivencia
Y si hemos adoptado a un ejemplar adulto, igualmente se le puede socializar siendo algo más pacientes, persistentes y comprendiendo su temperamento y personalidad de acuerdo a experiencias previas. A causa de su origen como perro centinela y de trabajo, el mastín español es fiel, protector, sumiso y equilibrado, por lo que educarlo es sumamente simple siempre que se emplee el refuerzo positivo, se sea tenaz y se cubran sus requerimientos de juego y consumo de energía. Igualmente es un can perfecto para efectuar destrezas caninas y trucos diversos, Ya que ello contribuye a mantenerlo incentivado de mente y de cuerpo.
Una de las dificultades de comportamiento importante del mastín español es la defensa de recursos, particularmente con la comida y con las personas. Como citamos, son criaturas muy glotonas y ansiosas, que de no ser correctamente adiestrados pueden desarrollar dicho trastorno y manifestar conductas violentas para defender lo que estiman como sus recursos. Por otra parte, en especial con los cachorros, es usual confundir el juego rudo con la agresividad. Tengamos presente que les encanta morder si no cuentan con juguetes diversos y apropiados o si no son guiados de forma correcta.
Características del Mastín Español
Esta especie de perros está catalogada como una raza gigante, lo cual se encuentra más que justificado, ya que los machos pueden alcanzar un peso de hasta 100 kilos. Su peso regularmente varía de 50 a 70 kilogramos en las hembras y de 70 a 100 en los machos. Al ser una raza enorme ha de tenerse presente que su desarrollo será más gradual que en otras razas de similar tamaño, ya que los mastines españoles usualmente alcanzan su peso final de los 10 meses a los dos años de edad.
Son impresionantes no solo por su tamaño, igual impacto causa su marcada musculatura, ya son animales de gran fortaleza y de poderosos músculos. Por si eso fuese poco, a nivel mundial se estima que es una de las razas, tal vez la que más, que posee mayor tamaño en proporción a su altura y peso. Ello se explica por su peso ya citado y su altura que se eleva de 72 a 80 centímetros.
Continuando con los rasgos físicos del mastín español, podemos señalar que sus patas son fornidas y fuertes, pero sin dejar de ser ágiles. De igual forma, numerosos ejemplares de mastín español exhiben un doble espolón en sus patas posteriores, de lo cual abundaremos en la sección de cuidados.
Su cabeza es inmensa, triangular y plana, con orejas caídas y mandíbulas definidas. Sus ojos usualmente son oscuros y de un tamaño diminuto y su nariz es de color negro. Algo típico del perro mastín español es que su piel usualmente cuelga en el área del cuello, creando una papada, y en las mejillas, haciéndolo parecer un abuelito adorable.
Su pelaje es liso, denso, semilargo, pese a que es algo más largo en el área de la cola, y de pelo grueso, mostrando una subcapa lanosa en los meses fríos que lo protegen de las inclemencias del tiempo. Sus colores más usuales son los sólidos y los atigrados, marrón claro o lobato, aunque puede exhibir muchos otros distintos, ya que la estandarización de la raza mastín español establecida por la Federación Cinológica Internaciona (FCI), no recoge una escala de color y patrones específicos.
Cuidados
Uno de los primordiales elementos a los que hay que estar atentos en lo referente a cuidados fundamentales es su alimentación. Hay que ser cuidadosos, ya que demuestran ansia por la comida y son glotones. Por lo que, debemos racionar las cantidades e impedir proporcionarles golosinas industriales frecuentemente. Esto es relevante para impedir que lleguen a padecer de sobrepeso, el cual sería muy perjudicial para su salud, en particular para sus articulaciones, lo que le puede acarrear agravamientos de cierta gravedad.
En vez de los premios consistentes de productos procesados, podemos escoger trozos de hígado de pollo, alimento que es excelente para otorgar en forma de recompensa. Como parte de los cuidados del mastín español están, igualmente, las horas que se le dedican al ejercicio. Como señalamos en el apartado anterior, hay que proveerle del ejercicio que requiera para liberar toda su energía, ya que de no ser así pueden volverse ansiosos e inclusive agresivos. Por lo que, se sugieren varios paseos a diario y momentos de juego, los cuales pueden compartir con los pequeños de la casa. Son canes que no se adaptan a la vida en un apartamento.
En tal sentido, para el total disfrute de las dos partes hay que adiestrarles para que jueguen de modo respetuoso y así impedir probables sobresaltos y daños, tanto a niños como al perro. De tal manera que, por ejemplo es crucial educar al mastín desde cachorro para impedir que muerda al jugar. Otro de los atenciones que requieres este can es conservar su pelaje cepillado y aseado, tanto de sucio como de parásitos como pulgas o garrapatas, las cuales pueden contagiar distintas enfermedades al animal.
Igualmente debe ser cuidado de los temidos mosquitos, quienes son portadores de patologías tan peligrosas como la leishmaniosis y la dirofilariosis o gusano del corazón. Por esta razón, se requiere la utilización de productos contra los parásitos, como pipetas, collares o pastillas. Para escoger uno u otro hemos de considerar nuestros requerimientos particulares, ver qué método se adecua más a ellas y asesorarse con el veterinario, ya que ciertos animales pueden ser alérgicos a algunas sustancias.
Su mantenimiento a nivel estético es de mucha mayor exigencia si se le compara con otras razas, por lo que no se le debe descuida:
- Un cepillado al día, dos o tres veces a la semana.
- Ha de ser bañado cada seis u ocho semanas, y hay que ser cuidadosos con sus uñas.
- No requiere que su pelaje sea cortado.
- Hay que estar atentos al cuidado de sus ojos, orejas y dientes.
- Se debe llevar al veterinario con la frecuencia requerida, y estar al día con su calendario de vacunaciones.
Salud
Tras revisar todos los rasgos del mastín español, vamos a considerar sus primordiales problemas de salud. De modo general, conforma una raza fuerte y fornida, pero ello no lo hace inmune a sufrir diversas enfermedades. Unas están vinculadas al tipo de raza, ya que al ser de tamaño enorme es un animal propenso a padecer displasia de cadera. Por ello, deben realizarse revisiones desde cachorro y exámenes diagnósticos como radiografías periódicas para evaluar la condición y evolución de la articulación.
El veterinario puede aconsejarnos estudios como la de PennHIP o sugerirnos el empleo de condroprotectores, que contribuyen a lubricar la totalidad de las articulaciones impidiendo molestias al perro. También, hay ejercicios que pueden ser de ayuda a los animales aquejados por la displasia. Otra de las patologías frecuentes en el mastín español es el entropión, en el que la orilla del párpado se dobla hacia dentro del ojo, perjudicando el globo ocular y ocasionando complicaciones que van desde irritaciones o problemas para abrir los ojos, hasta deterioro en las córneas e inclusive pérdida de visión.
A veces, dueños que han poseído a un perro mastín español señalan que son canes que terminan volviéndose locos. Esta presunción se encuentra vinculada con los trastornos psicológicos que gran parte de ellos desarrollan a causa de la soledad y a la ausencia de cariño a la que se ven sujetos. Particularmente se ha podido evidenciar en casos en los que cuidan terrenos que no son muy frecuentados por la gente.
Pero si le brindamos cuidado y cariño el mastín español se diferenciará bastante de asemejarse a ese mito de animal violento o loco. Como el restante de razas caninas, se sugieren evaluaciones veterinarias periódicas para prevenir y diagnosticar de forma temprana las enfermedades del mastín español, así como seguir el calendario de vacunaciones y ejecutar las desparasitaciones de índole interna y externas con la regularidad requerida de acuerdo al producto que utilicemos.
Selección del Cachorro
Los cachorros de Mastín de buen carácter son entrometidos y juguetones, prestos a aproximarse a las personas y con tendencia a socializar con ellos. A la hora de la adopción, lo más conveniente es escoger al cachorro que se encuentra a la mitad del camino, ni el que se la pasa golpeando a sus socios de camada, ni igualmente al que se oculta en una esquina.
Lo conveniente es que sea reunido al menos a uno de los progenitores, habitualmente la madre es la que se encuentra disponible, para garantizar de que desarrolle un temperamento grato con el que se sienta confortable, siempre que ello pueda ser posible. El conocimiento de la familia del cachorro puede proporcionarte una idea de cómo se comportará cuando sea adulto, luego se le ha de socializar con otros canes y humanos lo más pronto posible para favorecer el equilibrio del cachorro de Mastín en los años venideros.
Curiosidades del Mastín español
- Otras denominaciones que ha recibido esta raza son Mastín Leonés, mastín extremeño o mastín ganadero
- En el año 1981 fue creada la Asociación Española del Perro Mastín español, la cual desarrolló un programa de cría en procura de conseguir el tipo de mastín grande y fuerte de épocas pasadas.
- El Mastín español se valía de la protección de su considerable papada así como de carlancas o carranclas, un conjunto de collares gruesos metálicos con púas.
- El patrón racial inicial del mastín fue desarrollado por la FCI en el año 1946.
- Desde fines del siglo XIX comenzó a menguar la población del Mastín español, situación que se incrementó en el siglo siguiente, particularmente con la Guerra Civil Española.
- La esperanza de vida del Mastín español es de 10 a 11 años.
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