Los llamados hijos de Shangó, son aquellos seguidores de esta importante deidad perteneciente al panteón Yoruba, denominado como el dios del rayo y el fuego, un dios con mucha fuerza y autonomía, características con las que cuentan todos sus hijos, ya sean hombres o mujeres.
Hijos de Shangó
Los denominados hijos de Shangó, son un elemento a destacar dentro de la práctica de la santería y otros cultos que hacen parte de la religión Yoruba. Una persona para poder considerarse un hijo de este dios debe cumplir con una serie de pasos, bajo la orientación de un sacerdote al cual se le llama dentro de la religión Babalawo.
Estos cultos o ceremoniales de santería, tienen sus orígenes en los ritos y tradiciones afrocubanos, los cuales eran practicados desde épocas bastante antiguas. Hoy en día, dicha cultura se ha ido propagando en todo el mundo, y cada vez son más los fieles devotos que desean ser parte de la familia Yoruba, registrado como uno de los hijos de Shangó.
Si tienes la suerte de haber nacido un 4 de diciembre, al igual que este orisha, puedes considerarte uno de sus hijos, aunque esto no es un fiel requisito. De igual manera, debe contar con ciertas características y otros atributos que sean similares a los de Shangó para poder ser dignos de llamarse sus hijos, y cumplir con algunas recomendaciones y consejos dados por su santo Padre.
Existe cierta confusión entre algunos seguidores de la religión Yoruba que tienen la creencia de que solo con darle ofrendas a esta deidad que sean de su agrado, ya pueden llamarse hijos de Shangó y esto no es verdad. Hace falta mucho más que eso.
No todos tienen este privilegio, pues deben de cumplir con ciertos requisitos y pasos, siendo uno de ellos, el asistir a una casa de santería y presentarse ante el sacerdote o babalawo, donde se le hace un registro para recibir “la mano de orula”, conocido con este nombre al tipo de ceremonias o ritos de iniciación de toda persona que desea estar dentro de la santería. Encuentra más información en Eleguá.
Según la creencia de esta tradición, es mediante esta actividad donde se le indica al practicante, de qué deidad es hijo o hija. Cada uno de los hijos de los santos o dioses Yoruba, cuenta con diversos atributos, que sirven como elemento diferenciador entre unos y otros, dentro de la gran gama de deidades con las que cuenta la mitología.
Debido a esto, los hijos de Shangó no son la excepción a este enunciado. Se pueden diferenciar de los hijos de otras deidades, en varios aspectos, por ejemplo, en su gusto por el baile. Disfrutan de las celebraciones donde hay música bailable, teniendo preferencia por la melodía del repique de tambores, mostrando una gran habilidad en lo que respecta a la ejecución de este popular instrumento musical.
Existe un ceremonial en homenaje a Shangó, que consiste en la realización de un atractivo baile, donde algunos de sus hijos, se lo colocan sobre los hombros y comienzan a darle vueltas, para quedar mirando de frente al grupo que toca los tambores. Este es uno de los dioses que representa la virilidad y la fuerza, por lo que hay muchos que se identifican con él.
Otra característica que posee este baile especial, es que los participantes, suelen ser muy expresivos con los ojos, adoptando una mirada como amenazante, cuyo objetivo no es otro que el imponer su supremacía. Por su parte, las hijas del santo Shangó, son un tanto de aspecto masculino, pues carecen de toda feminidad, es decir, no les gusta usar ni joyas, ni se maquillan.
Están catalogadas además como unas mujeres chismosas, que interfieren en asuntos que no son de su competencia y cuando obtienen una información, por lo general, la tergiversan, dando a conocer algo totalmente contrario a la información real, modificándose a su conveniencia, por lo que no son consideradas como personas de confianza.
Un aspecto positivo es que son estrictamente fieles; son incapaces de cometer una infidelidad o adulterio, y por esta misma razón, esperan lo mismo de su pareja, pues no son capaces de perdonar la infidelidad.
De igual manera, son muy trabajadoras y detestan el ocio, formadas con principios éticos e ideales. Los hijos de Shangó sienten un gran atractivo por el fuego y sus derivados, como el color rojo. Al igual que el santo Shangó, sus hijos son grandes tienen una gran fuerza por lo que se destacan como líderes, con una actitud positiva ante la vida.
Cuentan con un buen gusto por la comida, lo que les ayuda a la hora de preparar buenos platos. Son muy organizados y también sirven para poner orden a las cosas o a las situaciones, entre las que se pueden mencionar: festejos, un negocio, casas, entre otros. Son personas bastante generosas y con buen humor.
¿Quién es Shangó?
Antes de adentrarnos más en el tema de los hijos de Shangó, debemos primero hacer una breve exposición de quién es este importante dios del panteón Yoruba y cuáles son sus principales características y atributos, pues son los mismos que deben reflejarse en el comportamiento y las actividades de quienes se hagan llamar sus hijos.
Shangó es una deidad principal dentro de la religión y la santería, quien contaba con muchas cualidades de determinación, fuerza y valentía. Por eso era el dios del rayo y del fuego, dos elementos que por sí solos, muestran un gran poder. Si quieres conocer de su poder puedes invocarlo a través de una Oración a Shangó
La popularidad de Shangó, es bastante elevada, por lo que figura entre los dioses más populares de la mitología. Es amo y señor de los elementos del relámpago y el trueno, pero también del fuego. Este santo posee una gran energía la cual les traspasa a todos sus hijos. Cuenta en su haber con muchos amores y mujeres debido a lo sobresaliente de su virilidad.
En cuanto a sus atributos, se dice que es muy justo y le da un gran valor a la justicia, por lo que muchas veces actúa como el juez de los dioses de Yoruba. Siente una gran afición por el baile y la música de tambores. Entre sus características, también posee un lado negativo, pues ostenta un fuerte carácter, por lo que en ocasiones puede llegar a ser muy violento.
¿Qué es Yoruba?
Yoruba, es una cultura extensa, originaria de África, específicamente de la región de Nigeria, que cuentan en su haber con 40 millones de personas, conceptualizando en un principio como un tipo de etnia.
Luego pasó a considerarse como una religión, basada en creencias, tradiciones y cultura, que identifican a un pueblo, marcado por la experiencia de la vivencia en esclavitud. Los practicantes de esta religión en su mayoría son agricultores, artesanos y comerciantes.
Con el paso de los años, esta doctrina ideológica, logró calar dentro de la cultura de muchos países, adaptándose a lugares desconocidos y que inclusive, cuentan con otros tipos de valores religiosos y creencias.
La diáspora de esta creencia data desde los tiempos de la esclavitud colonial, cuando comenzó a trasladarse un grupo de esclavos hacia otros continentes y países, en el caso de los suramericanos: Cuba, Venezuela, Brasil y la región de Santa Fe, específicamente hacia La República Dominicana.
Con la llegada de los esclavos iban también las prácticas de sus ceremoniales y ritos, ya que se negaban a dejar de lado sus ideales y sus creencias. Sin embargo, se vieron obligados a practicarlos de manera clandestina, ya que estaban rotundamente prohibidos.
Principales características
Una de las principales elementos con las que cuentan los hijos de Shangó, es que todos poseen por naturaleza, el poder de la adivinación, sirviendo esto como un gran atractivo y llamando la atención. En vista de que son amantes del dinero, también cuentan con grandes habilidades en los negocios para poder hacerse de riquezas y mucho dinero, sin embargo, no les gusta tener que trabajar para conseguirlo.
Tienen un gran potencial y son muy inteligentes, además de que contiene una fuerte carga de energía positiva. Otra de las características con las que son descritos los hijos de Shangó, es que al igual que el dios, los hijos son parranderos y aman los bailes y las fiestas. Son amantes de la buena comida y de otros placeres de la vida.
También, son personas violentas, propensas a padecer ataques de ira, lo que los hace mostrarse impulsivos en sus acciones y hasta intolerantes. Los hijos de este Orisha suelen ser muy agresivos y vengativos si los ofenden, mostrándose con una actitud prepotente y muy altiva. Suelen ser muy celosos, no solo con sus parejas sino también con amistades y otras relaciones personales y familiares, además de que no perdonan una infidelidad.
Como su Padre Shangó es el amo del fuego, a sus hijos, les encanta, y al igual que al dios, también les gusta el color rojo. No tienen miedo de enfrentarse a alguien para defender sus ideales, y suelen ser generosos con las personas más cercanas a ellos, transfiriéndoles su misma energía.
Otra de las características de los hijos de Shangó es que son considerados como seres muy justos, siendo enemigos de las injusticias. De igual manera, poseen una gran habilidad para decir mentiras. Dignos hijos de su Padre, les gusta hacer alardes de su gran fuerza, y tienden a ser muy sexuales y pasionales, sosteniendo relaciones con diferentes mujeres y procreando muchos hijos. Descubre también la Oración a Yemayá.
Entre las labores donde pueden desempeñarse los hijos de Shangó están: bomberos o policías, destacándose también en el mundo de las artes, ejerciendo como músicos. Las hijas de Shangó, son mujeres un tanto varoniles pero muy apasionadas, que a pesar de no perdonar una infidelidad, pueden llegar a tener múltiples parejas. Son algunas veces charlatanas pero muy trabajadoras.
Nombres de hijos de Shangó
Una de las distinciones que hace la religión Yoruba con respecto la conformación de otras, es que sus miembros o quienes la conforman o constituyen, deben ser bautizados dentro de la religión y adoptar un nuevo nombre, el cual va a depender del santo que se le elija como Padre.
Para la creencia de esta doctrina, ya ese nombre ha sido escogido para ellos desde el mismo momento en que nacen, pero es una vez que se inician en los caminos de la santería, cuando se les he revelado. Una vez que se le entrega el nombre a la persona, esta deberá llevarlo con mucho orgullo, no podrá esconderlo y deberá presentarse con el mismo en todas partes.
También se establece dentro de la religión Yoruba y sus creencias, que el nombre que se le es entregado a la persona estará ligado a su vida por lo que tendrán influencia en ella, especialmente en su futuro, con el cual hará grandes cosas que dejarán huella y marcarán su historia.
En forma particular los nombres de estos hijos están vinculados a las características de Shangó, añadiendo una cualidad adicional a lo que tendrá que asumir la personalidad del portador de dicho nombre. A continuación, se mostrarán algunos de estos nombres:
Alabi; denominado como el manto del bien
Arabi; el rayo
Bango Che; Rey del jabón.
Efun Ekun; Señor de los tigres.
Ican Lenu; lengua de fuego
Obba Aña; Rey del tambor
Obba Dina; Rey de la candela
Obba Dimelli, Rey coronado dos veces.
Obba Ekun, Rey de los tigres
Obba Erula, Soberano de la guerra.
Obba Kosokisieko, Rey que vive en la palma.
Obba Lari o IlariObba, mensajero del Rey
Obba Oñi, dueño de la miel.
Obba Orun, Rey del sol o del cielo
Obba Remi, mi amigo el Rey.
Obba Yomi; Rey del agua.
Obban Yoko; Rey sentado.
Oddu Ara, Piedra del rayo.
Okan Aremi; mi amigo de corazón.
Oloyu Morula Obba; los ojos del hijo del Rey.
Shango Ladde; su gran corona
Su pasión por el baile
Según la tradición, Shangó le habría entregado su tablero de Ifa a Orunmila, (máxima deidad Yoruba), a cambio de que le otorgue las destrezas para el baile ya que, para él representa una de sus grandes pasiones al igual que la misma música en sí. Este elemento lo llevó incluso a ser nombrado como Batá, que significa “el dueño de los tambores”.
Por ser una cualidad muy característica de esta deidad, le fue conferida a sus hijos, los cuales cuentan con grandes destrezas y hábiles para el baile, y también en la ejecución del instrumento de tambores, buscando emular al santo Padre.
En medio de las ceremonias en su honor, se dice que Shangó baja a bailar junto a sus hijos, y se monta sobre los hombros de uno de ellos, mostrando un baile espectacular. La forma tradicional es con un giro similar a un trompo, pero solo de tres vueltas exactas, para luego quedar de frente hacia la posición donde se encuentren ubicados los tambores.
Mediante la ejecución de su baile, mostrará alguno de sus dotes como, por ejemplo, su fuerza y virilidad, haciendo de su baile al provocativo. Al bailar contará con los elementos típicos de su vestimenta como es un llamativo traje de color rojo y la compañía de su poderosa hacha, la cual muestra durante el baile como todo un guerrero, con una expresión muy notable en sus ojos que se torna amenazante y hasta retadora.
Indumentaria de los hijos de Shangó
Un detalle muy característico en los hijos de Shangó es su indumentaria o vestimenta, la cual cuenta con unos colores determinados, que sobresalen y predominan como los son el rojo y blanco, de manera alterna. En los ceremoniales, un elemento que también brinda gran fuerza es una Veladora abre caminos
Por lo general, el traje es de color rojo con bordes en color blanco, la forma de la camisa bastante holgada y roja; los pantalones cortos a la altura de la rodilla y también de color rojo, terminado en puntas. El color del pantalón también puede ser blanco pero la condición es que será corto y con el filo terminado en puntas.
Cuando no llevan camisas, por lo general se dejan el pecho al descubierto, o simplemente se colocan una pequeña chaqueta en colores rojo y blanco. Otras veces solo se les puede ver llevando una especie de banda en forma cruzada y de color rojo.
Como adornos, usan collares de cuentas en colores rojo y blanco que vayan en una posición alternada, y tienen que ser exactamente 280 cuentas en total. También es parte de su indumentaria portar objetos que los identifiquen con su santo Padre Shangó, en caso específico, su hacha de poder con forma de petaloide de dos cabezas, además de su espada y una copa.
¿Cómo son los hijos de Shango en el amor?
En vista de que Shangó, tiene como características ser muy viril y tener muchas mujeres, lo mismo se preguntan las personas con referencia a sus hijos, quienes como ya se ha dicho, suelen ser muy generosas, con buen humor, dedicados cuando quieren, pero también, son personas bastante amorosas.
Cuentan con la virtud de poder encontrar a una pareja que sea de sentimientos profundos, al igual que ellos. Al igual que su Padre, los hijos de Shangó son muy apasionados entregándose por completo a la persona amada. Sin embargo, también son bastantes obsesivos y celosos, lo que termina generando problemas con sus parejas.
Suelen ser de los que cuando se enamoran, dejan todo por esa persona, incluso, hasta hacen de lado a su familia, las amistades, sus obligaciones en el trabajo, todo para dedicarse solo al ser amado. Este aspecto es más notorio en el caso del género femenino, porque son las más comprometidas y sentimentales.
Para el género masculino, mostrando sus celos y obsesiones, es la manera que tienen para representar su virilidad, también el andar con varias mujeres, algo que no les agrada a muchas, pues prefieren que les sean fieles, viendo por el contrario esa conducta como una falta de respeto. Se dice que por ello, muchos hombres tienden a padecer de desamor.
Sin embargo, también se destaca el hecho de que cuando escogen a una sola mujer, se entregan por completo a ella y le demuestran toda su pasión y amor, incluso les son fieles para poder demostrarles sus verdaderos sentimientos. Generalmente, los hijos de Shangó en el amor suelen seguir a su corazón y sus ideales.
Relación con sus hijos y Oshun
Oshun, es una deidad perteneciente a la religión Yoruba, considerado incluso como una de las más importantes. Los practicantes de la religión invocan su nombre para que los ayude en situaciones de conflicto o escasez de dinero. Tiene poderes mágicos como el resto de los dioses del panteón Yoruba, siendo el regidor de los lagos y ríos. Se representa como una deidad femenina, que además simboliza el amor y la fertilidad.
Dentro de la mitología se le asocia sentimentalmente a los dioses Orunmila, Ogún, y Oshosi pero, también se le vincula como una de las esposas de Shangó, la segunda. Por su estrecha vinculación con la fertilidad, muchas mujeres que no pueden tener hijos, invocan su nombre, solicitando de su ayuda para poder quedar embarazadas.
En cuanto a los hijos de estos dioses, lo recomendable es que se eviten, quedando previamente establecido que los hijos de Shangó no podrán coronar a un hijo de Oshun, ni viceversa. Para la religión, esto es considerado en la actualidad como un símbolo e respeto, ya que en el pasado, los seguidores de Shangó asesinaban a los seguidores de Oshun, por lo que es mejor que no estén juntos.
El enfrentamiento entre estos dos dioses puede compararse con la ocurrencia de una batalla entre el fuego y el agua, que son los elementos que los caracterizan a ambos. Se convirtieron en rivales, debido a que Shangó llevaba consigo acciones de muerte y miseria, mientras que Oshun se encargaba de evitar que esto ocurriera, por lo que el dios vio la necesidad de neutralizarla para que no interfiriera con sus acciones. A pesar de esto, ambos elementos deben prevalecer para que pueda existir un equilibrio.
Ebbo para los hijos de Shangó
El Ebbo dentro de la religión Yoruba, trata sobre un área muy importante dentro de la santería, donde se le hace un trabajo dedicado a una deidad específica o santo, a través de la celebración de un ceremonial especial. Las razones para llevar a cabo dicha celebración pueden ser varios, pero los más generales son:
- Para purificar
- Para ofrendar
- Para realizar un sacrificio
Los mismos, se hacen con el objetivo de alagar a los dioses y orishas, y deben estar orientados a cumplir deseos producto de buenas acciones desechando las malas. Además de tener un motivo, se debe de seguir una metodología.
Entre las solicitudes más comunes se encuentran el pedir por buena salud, aceptación por parte de las personas dentro de los grupos sociales, buena suerte o fortuna en el emprendimiento de nuevos proyectos, o en el caso de solicitar amor, que alguna persona se fije en ellos pero que tenga buenas intenciones. Quizá te interese conocer la Oración a Eleguá.
En la parte de los sacrificios, los mismos se llevaban a cabo empleando animales para ello, usándose incluso a manera de ofrenda, aunque no siempre era bien visto por algunos espectadores de estos ritos. Para la religión Yoruba, los sacrificios con animales son considerados como una especie de control que se tiene de la vida, para poder transformarla en una de mejor calidad.
Hay veces donde el animal se deja vivir y sus cuidados son encomendados a la persona que lo ofrendó. En el caso particular de los Ebbo de los hijos de Shangó, los tipos de ofrendas deben de ser las siguientes:
Cuatro plátanos verdes debidamente horneados, para luego colocarlos delante de los demás materiales del santo, dentro de un recipiente especial. A través de dicha ofrendas se puede pedir por la salud de la persona, colocando dos velas de color y dejando la ofrenda durante unos 16 días.
Al finalizar esos días, tendrá que hacer un baño de despojo, utilizando varias especias e hierbas, de acuerdo al tipo de solicitud que se vaya a hacer. En caso de la que la petición esté enmarcada en dinero o negocios, la ofrenda ideal es el vino y en el caso, de andar buscando ayuda para cosas del amor, ofrézcale al santo un poco de vino rosado.
Pataki de los hijos de Shangó y Oyá
El término Pataki, tiene que ver con la historia que constituye a cada ódun, muchas de las cuales, forman parte de una especie de metáfora. Este un lugar místico y espiritual, donde gobernaba el dios Obatalá y podían convivir todas las demás deidades. Estas cortas historias servían de referencias para dar a conocer alguna situación acontecida.
La mayoría de las veces, no ofrecían suficiente claridad, y por el contrario, tendían a confundir a todos quienes las leían. Por eso, tomaron la decisión de que fuesen leídas sólo por parte de los sacerdotes de Ifa, quienes eran los indicados para hacer la interpretación correcta, además que son de todos los participantes de la santería, quienes ostentan un rango más elevado que el resto de los miembros.
En cuanto a explicar quién es Oyá, podemos señalar que es una deidad perteneciente al género femenino, que simboliza dentro de la religión Yoruba a la pasión y el salvajismo. Como características se puede decir que es una orisha segura de sí misma, capaz de tomar decisiones acertadas y sin ninguna indecisión ni duda alguna.
Dentro del panteón Yoruba, posee alto grado, siendo muy poderosa y disciplinada. Se le ha otorgado el poder e dominio de los relámpagos y del viento. Es una de las esposas de Shangó y se manifiesta en la Tierra a través de la ocurrencia de algún desastre natural, pues es un tornado. Su presencia inspira misterio y elegancia y misterio.
A continuación, se dará el relato de un pataki sobre los hijos de Shangó, que comienza por la visita que le hiciera esta deidad a Oshun. En este encuentro se produjo un altercado donde el santo fue cuestionado en referencia a que si no sentía vergüenza de estar junto a una mujer defectuosa.
Shangó no sabía a quién se estaba refiriendo la fémina, por lo que enseguida le aclaró que se trataba de Obba, a quien le arrancó el pañuelo que llevaba sobre su cara, percatándose del hecho de que le hacía falta una de sus orejas.
Luego de esto, el santo decidió que ya no iba a vivir con ella, a lo que ella reaccionó tomando la decisión de apelar su decisión de una forma judicial. Shangó expuso los motivos de su acción, más sin embargo, accede a ir al cielo con ella, pero poniéndole como condición que cuando vaya a la Tierra, solo podrá hacerlo si se lleva a sus descendientes consigo. Los hijos de Shangó usan un pañuelo blanco, para seguir con la tradición.
Frases a sus hijos
Shangó le ha dedicado varias frases especiales a sus hijos, con la intención de brindarle una serie de consejos, con los cuales puedan sentirse bien consigo mismos y con el mundo exterior. Dentro de las listas con frases más comunes se encuentran:
El león es león, así le corten la melena, así que no te detengas por nada y sigue adelante.
No temas de nada ni a nadie, yo siempre estaré aquí contigo, así que llévame con orgullo.
No te quitaré el gusto de pelear tus propias guerras, pero si necesitas ayuda, estaré presente para ti.
Si alguna vez te llama el pasado, no le respondas, pues no tiene nada nuevo que ofrecerte, mejor vive el momento.
No actúes impulsivamente, pues solo queda después arrepentimiento y vergüenza, que son un castigo para todos los que obran sin pensar.
Así como las olas aguantan los golpes de otras olas, yo te enseñaré a que aguantes los golpes que te dará la vida.
Todo aquel que me esté deseando mal, se le revertirá en su contra afectando su propio destino.
Si te gusta este tema sobre la santería y sus deidades, además de este artículo, te invitamos a revisar también dentro de nuestro blog la Oración a Obatalá