Qué es un acantilado y cómo se forman

Cuando hablamos de acantilado, nos referimos a un accidente geográfico que se caracteriza por una fuerte pendiente. Este tipo de formaciones, pueden ubicarse en zonas de costa, zonas montañosas o en las riberas de los ríos. Muchos son los que nos conocen qué es una acantilado, cómo se forman o los tipos que se pueden encontrar, y para eso estamos nosotros aquí, para explicárselo.

No es de extrañar, que se les ponga el ojo a estos accidentes geográficos, ya que una vez estas delante o encima de uno de ellos son capaces de inspirar diferentes sensaciones y emociones, te sientes pequeño ante un infinito tan grande. Para que puedas despertar este tipo de sensaciones, también te nombraremos algunos de los acantilados que podemos encontrar en Europa y que son merecedores de una visita.

¿Qué es un acantilado?

Como no puede ser de otra manera, vamos a comenzar esta publicación definiendo qué es el concepto de acantilado. Hablamos, de accidentes geográficos que se han producido por la erosión. Generalmente, tienen formas de rocas verticales o semiverticales muy resistentes. Los riscos que los componen, son laderas rocosas que hacen un corte en el suelo. Este tipo de acantilados, se forman debido a movimientos de tierras o de fallas tectónicas.

Además de los acantilados de zonas de montaña, también podemos encontrarlos cerca de los océanos o incluso en las riberas de algunos ríos. Normalmente este termino, se asocia a paredes de roca que se localizan a lo largo de una zona de costa.

Este tipo de accidentes geográficos, pueden utilizarse para la practica de deportes extremos como pueden ser el saltos en parapente o paracaídas, saltos al agua, escalada de la pared del acantilado o para deportes un poco más comunes como el senderismo. Para hacer cualquier tipo de los deportes extremos mencionados, deben ser personas expertas y siempre realizarlo con material adecuado y seguro.

¿Cómo se forman los acantilados?

Ya conocemos qué es un acantilado, por lo que es el momento de descubrir como es el proceso de formación. Por lo general, los acantilados se forman por la acción de fenómenos naturales. Estos fenómenos de los que hablamos, ayudan en su formación a parir de la actividad tectónica. Como todos sabemos, la tierra se compone de placas de gran tamaño que con el paso del tiempo pueden ir desplazándose. En el caso de que dos placas se encuentren en el mismo punto, se genera una presión que provoca que una o ambas placas se dirijan hacia arriba, lo que da como resultado una montaña o acantilado.

Sin embargo, su formación se debe a procesos de erosión y meteorización, es decir, a causa de la acción de determinados fenómenos naturales como puede ser la lluvia o el viento, que provoca que las rocas poco a poco vayan rompiendo. En las zonas de costa, es donde más se sufre este tipo de erosión debido a los fuertes vientos y grandes olas.

Al producirse esa erosión en las rocas, estas desprenden pequeños trozos a los que se les llama sedimentos o aluviones y que van a parar al fondo del mar y son arrastradas por el movimiento de las olas. En el caso de los acantilados de zonas de interior, son arrastrados por las corrientes de los ríos o por el viento. Las rocas de mayor tamaño, lo que provocan son los conocidos aluden y acaban amontonándose cuando llegan al fondo de los acantilados.

Se pueden diferenciar dos tipos de acantilados, los activos que son los que se ubican en zonas de agua profundas y son golpeados por la fuerza del oleaje. Y los acantilados inactivos, que son los formados sobre zonas arenosas, es decir, están mas alejados de la zona de costa.

Características de una acantilado

Llegamos, al tercer apartados importante para conocer todo lo relacionado con los acantilados. Vamos a explicarte, cuales son las principales características que guardan los diferentes acantilados que podemos encontrar a lo largo y ancho del mapa del mundo.

• Estos accidentes geográficos principalmente están compuesto por piedras calizas, dolomita y areniscas. Son tres materiales difíciles de erosionar rápidamente
• En la gran mayoría de los acantilados, nos encontraremos con una gran elevación y una pendiente muy pronunciada que normalmente suele acabar en una pendiente algo más pequeña
• Se originan debido a cambios en las características de las rocas que componen esta formación geológica o por movimientos de la placas bajo tierra
• Existen acantilados en el que las condiciones de vida de las plantas es inexistente, por lo que no se adaptan a esas condiciones. En otros ocurre todo lo contrario pudiéndonos encontrar diferentes variedades
• Su formación se debe a un proceso continuo de erosión y, la descomposición de los minerales y las rocas que componen el acantilado
• Los sedimentos de los acantilados se desprenden en el proceso de erosión y, van a parar al fondo de los océanos, que posteriormente son arrastrados por el oleaje
• La base de los acantilados suele estar cubierta por una acumulación de rocas que han ido cayendo con el tiempo

Alguna de las curiosidades de estas formaciones es que, muchos de ellos fueron formados por glaciares, una gran masa de hielo que cubrieron grandes partes del planeta en la Edad de Hielo. Muchos acantilados, son popularmente conocidos por crear maravillas naturales como son las cascadas. Algunos de los mayores acantilados que tenemos en el mundo, no se encuentran a la vista de todo el mundo, sino que están bajo agua.

Acantilados en Europa que debes visitar

En el continente europeo, tenemos una gran variedad de acantilados que si estas interesados en visitarlos solo tienes que informarte para ello. Como no podemos hablar de todos y cada uno de ellos, vamos a explicaremos los que para nosotros son dignos de admirar.

Acantilado de Los Gigantes – España

No podía ser menos, y empezamos con una maravilla que tenemos en nuestro país, el acantilado de Los Gigantes. Una formación de roca volcánica que se encuentra en la costa de la isla de Tenerife, más concretamente en la localidad de Santiago de El Teide. Hay en la isla, quienes lo llaman las murallas del infierno, sus puntos más altos oscilan entre los 300 y 600 metros.

Preikestolen de de Ryfylke – Noruega

Si estáis pensado en hacer un viaje a los Fiordos Noruegos, la parada en este acantilado es más que obligatoria. Hablamos de una formación rocosa de más de 600 metros de altura sobre el fiordo Lysefjord. Uno de los acantilados en zona costera más altos del mundo y que, cada año recibe a miles de turistas de todo el mundo.

Acantilados de Moher – Irlanda

Impresionantes acantilados que podréis encontrar en la localidad de El Burren, en Irlanda. Ocho kilómetros de acantilados a más de 200 metros de altura. Cuidado con las rachas de viento traicioneras, por lo que aquellos que quieran asomarse y ver como ruge el mar bajo el, deberá tumbarse sobre su suelo. Desde el punto más alto de estas formaciones se puede vislumbrar la bahía de Galway las montañas Maumturk.

Costa Quebrada – Cantabria

Otro espectáculo de la naturaleza que podemos disfrutar en nuestro país es, La Costa Quebrada, que forma parte del litoral cantábrico, y es toda una maravilla. Un total de 20 kilómetros que comienzan en los arenales de Liencres y va hasta la península de La Magdalena.

Acantilado Gásadalur – Dinamarca

Pueblo costero que se localiza en la isla de Vágar, un pueblo que se ubica sobre uno de los acantilados más espectaculares que podemos encontrar en Europa y que, mira hacía el mar. Gracias a la construcción de un túnel, el acceso a este acantilado es posible ya que hace varios años esto era impensable.

Acantilados de Aval – Francia

Este espectáculo de la naturaleza tan bello, lo puedes disfrutar si te acercas a la zona norte de la costa de Normandía. Desde el pueblo de Étretat, podréis caminar por un camino disfrutando de las vistas y contemplando la creación de la erosión del viento y del mar hace millones de años sobre las rocas.

Punta de San Lorenzo – Portugal

De Madeira, no solo destacan su impresionantes bosques, los paisajes o la comida, sino que encontramos este espectacular acantilado que se ubica sobre el Atlántico y el cual podrás recorrer a través de pequeños caminos habilitados. La Punta de San Lorenzo, es un paisaje espectacular y que es el habitar de diferentes especies de plantas, así como de aves e incluso de focas monje.

Bonifacio – Francia

La panorámica de este paisaje, es realmente única y algo que deja con la boca abierta a todo el mundo que la visita. Bonifacio, una comuna francesa que se encuentra ubicada en una pequeña península y esta rodeada de acantilados. Acantilados blancos que no solo destacan por el contraste con los edificios, sino también con el verde de la vegetación. Una vista digna de admirar ya que, da la sensación de que las casas al borde del acantilado van a caer sobre el mar.

Hasta aquí nuestra publicación, en ella has podido aprender qué es un acantilado, cómo se forman y algunas de sus principales características. Ahora solo queda, animaros a visitar algunos de los acantilados que os hemos mencionado y disfrutéis de estas formaciones que la madre naturaleza nos a dejado para que admiremos su gran poder y sus impresionantes formas.