Algunas ciudades ya están sufriendo el fenómeno de gentrificación, lo hemos podido conocer en nuestra propia ciudad o ciudades conocidas, con un proceso de transformación en algún barrio conocido. Dicho fenómeno ocurre desde hace décadas y ocurre más de lo que imaginamos alrededor del mundo.
Muchos barrios de numerosas ciudades terminan renovándose y con la reconstrucción de una nueva zona urbana, moderna y más lujosa. Este hecho sucede como reemplazo de barrios con ingresos bajos y que son reemplazados por nuevas viviendas y con un costo de vida alto, una situación que crea en algunos casos un conflicto.
¿Qué es la gentrificación?
Como ya hemos detallado, es un fenómeno urbano que sucede como un proceso de renovación y transformación. Se venden o restauran las zonas pobres y se hace una reconstrucción urbana de personas de clase media o alta, desplazando a los habitantes más pobres de las áreas de intervención. Esta nueva zona se convierte en una zona de alta renta, por lo que los antiguos residentes no pueden suplir con sus sueldos.
La ONU lo describe como un hecho de evolución, un proceso de renovación y reconstrucción urbana. Existe un flujo de personas de clase media o alta que desplaza a los habitantes más pobres de esta zona. Hay diferentes estudios que se analizan para comprender si este fenómeno es viable con el resto de la ciudad, y la ONU lo reconoce factible siempre que se adopten ciertas medidas.
Cuando se adoptan políticas económicas redistributivas. A través de este hecho de renovación, se pretende impulsar una regeneración, con un beneficio de los ingresos municipales y así mejorar la oferta y la distribución de personas y viviendas hacia otras áreas.
La retención de la población existente para mejorar la vida social del nuevo enclave. Y fomentar a la pequeña empresa con microcréditos, para ayudar a levantar todo lo deteriorado y crear mejor interacción social.
Con la gentrificación podemos observar a miles de personas que trabajan y buscan lugares con un menor coste de vida. Acceden a lugares para mejorar su nivel y crear una familia con estabilidad. Suele ocurrir que marchan a barrios nuevos con nuevos accesos a la vivienda y con un precio que se pueden permitir.
Sin embargo, el hecho de trasladarse del campo a la ciudad es el fenómeno que también se conoce como el de gentrificación, como el que estamos señalando. La queja reside en que estas nuevas personas compran en lugares donde han sido expulsadas otras. Estas otras personas han sido durante años supervivientes de estas zonas urbanas y que ahora tienen que trasladarse a una nueva zona o barrio, porque el coste de la vivienda sube para ellos. Generalmente sucede en personas vulnerables, como jubilados o con discapacidades.
Cuando es positiva la gentrificación
La gentrificación puede tener efectos positivos, relacionados con la infraestructura y los servicios. Si estos servicios aumentan, beneficiarán estas áreas gentrificadas, sobre todo en las personas que tienen bajos ingresos. Otro aspecto positivo es ayudar a revitalizar áreas urbanas degradadas y mejorar la calidad de vida de todos los residentes.
Impacto social con este fenómeno
Estos nuevos espacios están pensados para atraer a nuevos vecinos, con una vida urbana y espacios de buena calidad para que puedan darse el lujo de vivir en ellos. Estos nuevos vecinos han tenido que dejar otros lugares y vivir lejos de su lugar de trabajo.
La gentrificación tiene un impacto social para las personas que ya residían en dichas zonas, ya que terminan afectadas por varios factores. Los nuevos residentes son personas que tienen un poder adquisitivo mayor y esto empuja a que deroguen nuevas necesidades y expectativas. Sucede que se emita un nuevo cambio y que las antiguas pequeñas empresas tengan que cerrar o hacer un cambio nuevo. El hecho es tener que abrir nuevos negocios más caros y exclusivos que son accesibles para los nuevos residentes.
Por otro lado, uno de los hechos negativos es el impacto social de la llegada de personas nuevas al barrio, lo que provoca que la vivienda suba de precio y las personas con bajos ingresos se tengan que ver obligadas a trasladarse a otras áreas. Esto puede generar conflictos entre las personas, dado a que se pierden las redes sociales entre la comunidad y puede generar conflictos culturales y socieconómicos.
¿Quién son las personas más perjudicadas en la gentrificación?
Cuando hablamos del impacto negativo, es cuando conocemos una pérdida de la identidad cultural de la zona, dado a sus costumbres. Cuando llega gente con un mayor valor adquisitivo hace que se desplace a las personas con rentas bajas. Comienzan a ser reemplazadas tiendas, bares o restaurantes por otros más modernos.
Las personas más vulnerables son las que tienen bajos ingresos, como personas mayores, personas sin hogar, discapacitados o personas vulnerables. Muchos de ellos no pueden asumir la subida de precios y se arrastran a trasladarse a lugares más asequibles, pero, aunque parezca una solución al problema, en realidad, es un gran problema para aquellos que no puedan hacerlo y no dispongan de redes de apoyo.
¿Dónde se puede observar este fenómeno?
Este fenómeno sucede en muchas ciudades. En Europa ocurre en numerosos países y en España también. Ha sucedido en Barcelona con barrios como el Born o el Gòtic y en Madrid, en barrios como La Latina o Lavapiés.
La transformación de estos barrios ha generado mucha más riqueza entre medio y largo plazo, en el contexto del impacto social de la gentrificación. Se ha creado más seguridad en los barrios y ha mejorado la imagen de las ciudades, ya que se ven más limpios, modernos y atractivos. Si que es verdad que los barrios se vuelvan más modernos y hacen que los pisos o locales suban de precio.
Pero tiene su contrapartida, dado a lo que hemos comentado. El precio excesivo es una causa de especulación, lo que hace que los vecinos de toda la vida no puedan asumir ciertas subidas, por ejemplo una subida del alquiler, y tengan que abandonar el barrio. Por lo tanto, los barrios pierden parte de su identidad original y puede incluso haber un exceso de pisos turísticos.