Oración a Santa Lucía para pedir con fervor

Lucía de Siracusa es una de las santas mártires con mayor poder dentro de la Iglesia Católica. Cada 13 de diciembre, correspondiente a su santoral, todos sus devotos se reúnen en la casa de Dios para elevar la Oración a Santa Lucía que conocerás aquí.

ORACIÓN A SANTA LUCÍA

Oración a Santa Lucía para crecer en santidad, fervor y fidelidad

La historia de Lucía de Siracusa es bastante similar a las de otras mártires que ofrecieron su virginidad a Dios hasta el final de los días. Sus padres prometieron en matrimonio a un hombre pagano que solo la deseaba sexualmente.

El hombre al reconocer que no era de su agrado, denunció a Lucía ante el Prefecto romano Pascasio como una muestra de rechazo hacia su integridad o propuesta de matrimonio. La mujer fue conducida a Juicio para enfrentar la furia de Pascasio, quien ofendido, juró aplicar la máxima pena y sufrimiento para Santa Lucía.

Entre los castigos que afrontó Lucía fue el prostíbulo, hasta alegar las siguientes palabras:

«Aunque el cuerpo sea irrespetado, el alma no se mancha si no acepta ni consiente el mal»

Inmediatamente el Prefecto ordenó su traslado a la casa de la perdición para que los hombres del lugar saciaran su sed pasional con Santa Lucía. Para mayor sorpresa, los soldados no lograron moverla de su puesto por más intentos infructuosos que hicieron.

La única solución para destruir la integridad de Lucía es a través de la hoguera. Nuevamente la santa soportó el calor de su castigo, dejando en claro que aún no era el momento de partir al Reino de Dios.

«He rogado a mi Señor Jesucristo a fin que no me domine este fuego»

Luego de exclamar estas palabras, Santa Lucía desapareció al mismo tiempo que mitigó el fuego en el juicio. Los soldados se percataron que la mujer no sufrió ningún daño a pesar de los ataques incesantes por destruir su honradez.

En virtud que tales sucesos ocurrieron un 13 de diciembre del año 300, todos los fieles concentran en la Iglesia Católica para elevar una importante oración a Santa Lucía, para ser fieles devotos a cualquier designio de Dios Todopoderoso.

ORACIÓN A SANTA LUCÍA

Dicho esto, te presentamos algunas plegarias en su honor que son efectivas para reafirmar su fidelidad hacia su sagrada imagen.

¡Oh magnánima Santa Lucía! De cuyo nombre desprende los más hermosos significados de luminosidad infinita. En esta oportunidad me inclino ante su santa presencia para reafirmar mi amor hacia Dios, la Virgen María, su hijo Jesucristo y el Espíritu Santo. Oh Salve Reina, ilumina mi camino frente al mal, para despejar sentimientos de odio, envidia, avaricia, rencor y todo acto que ofenda al Altísimo.

Tú que te consagraste a temprana edad en el Reino del Cielo, te pido con mucho fervor por la salud de mi familia, allegados y conocidos. Bajo el poder de la hoguera en que fuiste sometida, purifica el pecado del mundo, convirtiendo a hombres y mujeres en buenos esclavos del Señor, así como se proclamó María, la Virgen, ante el poder infinito del Padre.

Comprometida en santo matrimonio ante un hombre pagano, que tu negativa le encolerizó, releva a cada hijo del Padre la fortaleza necesaria para salir adelante. Oh Salve Reina luminosa, protege el camino de todos los hombres que yacen en pecado. Pido por su salvación, para que gocen en la eternidad en el paraíso, mismo lugar prometido a todas las almas que han redimido sus culpas.

Arrestada e increpada, oh Santa Lucía, que nunca renunciaste a tu dignidad como cristiana, te pido solemnemente para seguir el ejemplo que el mismo Cristo nos enseñó. Hoy te pido con fervor por todas las ánimas benditas del purgatorio, para que logren el descanso eterno y logren escapar de las oscuras tinieblas del purgatorio. Oh Salve Reina, alcanza a todos sus hijos el perdón de sus pecados.

Víctima de torturas y de tormentos, que jamás sucumbiste ante los lamentos. Santa Lucía, madre mía, madre nuestra, elimina de nuestros corazones toda muestra de dolor, aflicción, culpas, tristezas y desamor. Convierte todo lo malo en bendiciones infinitas. Oh Salve Reina, eleva nuestro fervor para defender con holgura los designios de la Santa Madre Iglesia.

Por tu sangre derramada en tu juicio final, que ayudó a esparcir tu testimonio en el mundo. Bajo ese mismo poder solicito bendiciones para el mundo entero. Oh Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten misericordia de todos tus hijos devotos a la vestidura santísima de Lucía Siracusa, protégenos de todo mal y peligro, sobre las personas que anhelan nuestra aflicción.

Eres luz en medio de tinieblas, eres calma ante las aguas turbulentas, eres serenidad ante las llamas incesantes del fuego. Oh luz divina, oh Lucía Santísima, ruega por nosotros para el perdón de los pecados. Oh Salve Reina, intercede ante Dios, nuestro Señor, para ser dignos de su paraíso, de esa tierra prometida a las almas nobles que cumplieron su deber de grandes cristianos.

Te rogamos Señor que esta oración a Santa Lucía llegue con el poder que solicito en este día. Te suplicamos Señor para que la oración a Santa Lucía resuene en el mundo entero. Oh Salve Reina, que prometiste tu virginidad al Padre para ser merecedora del cielo, con mucho fervor te veneramos para ser dignos de tu seno. Bajo un corazón noble y sincero, te invocamos con esta oración.

Oh virgen poderosa, espejo de justicia, salva a todas las personas condenadas injustamente. Salve de un juicio aterrador, del mismo modo en que viviste un 13 de diciembre por la lujuria de un malhechor. Te imploramos, madre eterna, por todos los inocentes que son condenados. Ilumina su destino con verdad, rectitud, mansedumbre y bendiciones infinitas.

Ante ti me despido, virgen clemente, sagrada Lucía. Espero que lleguen a ti con la fuerza de las llamas abrasadoras esta humilde plegaria. Santa Lucía, poderosa soberana, atiende nuestras súplicas con gozo. Ruega por nosotros, santa madre de Dios, para que gocemos de ese paraíso celestial que Dios Todopoderoso preparó para todos sus fieles. Por los siglos de los siglos. Amén.

Además de la oración a Santa Lucía, podrás conocer otras plegarias interesantes para sumar a tus rezos:


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