Comenzar el día ante la presencia de nuestro Señor, es la mayor bendición que se pueda tener. Realice una oración para darle gracias a Dios por la noche, por el día, y en todo momento, para que fortalezca su comunión con Él.
Oración para darle gracias a Dios por la noche
Jesucristo nos revela la importancia de la oración. Es la que nos permite mantenernos en comunión con el Altísimo. Es el lugar perfecto para adorarlo y también entregarle nuestras cargas.
Orar junto a dos o más personas, podemos asegurar que Cristo se encuentra ahí, pero si lo hacemos en la soledad de nuestra habitación y con un corazón abierto, ten por seguro que el Señor te recompensará en público.
Entregarle nuestro día completo al Rey de reyes y Señor de señores, es tener la firme convicción que Él nos cuidará nuestra entrada y nuestra salida. Mientras que si le entregamos nuestra noche, Él será nuestro protector y quien guardará nuestros sueños.
La oración tiene tanto poder, que en el instante que decidimos doblar rodillas y acercarnos a nuestro Señor, se desata inmediatamente una batalla espiritual.
Cuando nuestro Creador decide respondernos, el enemigo hará todo lo posible para que la bendición no llegue. Sin embargo, mayor es el que está en nosotros que el que está en el mundo. No debemos temer pues, el Señor nos promete en el Salmo 121 que Él nos guardará.
Hoy te invito a que realicemos juntos esta oración para darle gracias a Dios por la noche y poder dormir confiadamente en el Señor Jesucristo.
Oración para darle gracias a Dios por la noche
Bendito Señor, Dios mío y Señor mío.
Mi fortaleza y quién me cuida en todo momento.
Señor hoy entro en Tú santa presencia
Pidiéndote que me laves con Tú poderosa sangre
Aquella derramada por Jesucristo en la cruz del calvario
Por mis pecados y rebeliones
Te doy gracias porque desde la creación del mundo
Me has demostrado que me amas y me cuidas
Cristo hoy quiero entregarte mis sueños y mi descanso
Que sean guardados por Ti Señor
Y que en Tu reposo, pueda renovar mis fuerzas
Confío en Ti porque no te adormeces, no duermes
Estás siempre alerta y pendiente de socorrerme mi amado Jesús
Gracias te doy por esta noche que llegó y por siempre estar ahí para mí.
En el nombre de Jesús he orado y en Ti he confiado.
Amén.
Cada oración que elevemos al Padre Celestial, las recibe como incienso agradable. Es cuando reconocemos que sin Él nada podemos hacer y que con Él todo es posible.
Hay un mundo espiritual que no tiene descanso, no reposa y está en constante movimiento. A diferencia de nosotros los seres humanos, que necesitamos reposar, para poder continuar otro día.
Estos seres espirituales son los ángeles, querubines, los hijos de Dios y por supuesto, nuestro Padre, Jesucristo y el Espíritu Santo. Sin embargo, también está el mundo espiritual maligno operando las veinticuatro horas.
Por eso, entregarle nuestra noche al Señor, podemos tener la seguridad y confianza de que mientras estemos reposando, Jehová de los ejércitos como león rugiente nos guarda, nos protegerá y renovará nuestras fuerzas en Cristo Jesús.
Oración para darle gracias a Dios por el día
Desde el momento en el que nos despertamos, comienzan las misericordias de Dios en nuestra vida. Un nuevo comienzo, es una nueva oportunidad de ser mejores, de cambiar las cosas y tener una relación con nuestro Señor más íntima y real.
Tener un tiempo para Jesucristo en la mañana y poder agradecerle por esta nueva oportunidad y entregarle nuestro día entero. Transformará por completo y en bendición nuestro día.
Tal y como lo establecen los salmos, el Sol no nos fatigará en el día ni la Luna de noche, pues Jehová de los ejércitos nos acompañará en cada paso que demos.
A continuación te comparto una oración para darle gracias a Dios por el día y pedirle que nos guarde de todo peligro.
Oración para darle gracias a Dios por el día
Padre amado hoy me presento ante ti
Para adorar y darte gracias por todas tus bendiciones
Por Tú amor y misericordias que se renuevan cada mañana
En esta mañana quiero entregarte mi día, mi salud, mi andar, mi trabajo, mis alimentos, todo mi Señor, que sea cubierto con la sangre poderosa de Tú Hijo Amado Jesucristo.
Hoy te entrego mi corazón y todo lo que soy a ti Señor.
Lávame de mis maldades y aléjame de las tentaciones que me rodean.
Eres mi Roca fuerte y en ti confío plenamente.
Nada, ni nadie me separará de ti amado Jesús.
Guarda mi entrar y mi salir, envíame ángeles guardianes y custodios para que mi pie no resbale y me mantenga siempre en tus caminos.
Gracias por todo lo que me das y todo lo que haces por mí y mi familia.
Te adoro hoy, mañana y siempre.
En el nombre de Jesús.
Amén.
En el libro de Efesios, en el capítulo seis, encontramos la armadura Santa de Dios. Ahí Pablo, a través del Espíritu Santo, nos incita a todos los días cubrirnos con esta Armadura. Porque, diariamente tenemos una lucha espiritual y la única manera de vencer es al lado del Todopoderoso.
Iniciar el día en comunión con nuestro Padre, no solo nos llenará de gozo y paz, sino que es la decisión más sabia que podamos tener diariamente, para nuestra vida terrenal y sobre todo la espiritual.
Efesios 6:13
13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes.
Pasos para orar
Hay muchos cristianos que les da temor orar porque sienten que no saben hacerlo correctamente. Es por eso, que deja de lado la oración que es el único medio que tenemos para acercarnos al Padre y entrar en comunión con Él.
Lo más importante que debemos tener siempre presente, es que el Señor no desea una oración repetitiva y que no provenga desde nuestro corazón. Él conoce realmente lo que queremos decirle y no lo podemos engañar.
Si seguimos el ejemplo de la oración que Jesucristo nos dejó, cuando los apóstoles le preguntaron ¿cómo debían orar?, podemos establecer los siguientes pasos:
Primero observamos que la oración va dirigida al Padre únicamente, no existen intermediarios u otros santos que le acerquen nuestra oración.
Luego, Jesús reconoce la Gloria del Padre y por esto lo alaba, bendice y le da gracias por sus bendiciones y maravillas.
Después de alabarlo debemos reconocer que somos pecadores y que debemos pedir perdón por ellos.
Muchos son los deseos de nuestra alma pero solo Jesucristo sabe qué es lo que realmente nos conviene. Por eso debemos reconocer y pedirle que se haga su voluntad, que es buena y agradable en todos los aspectos de nuestras vidas.
Hacer nuestras peticiones, entendiendo qué es lo que le agrada a nuestro Señor y poner todo en manos de nuestro Creador.
Por último, pedirle su resguardo y protección todos los días de nuestra vida. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra huestes espirituales de maldad.
Al terminar de orar, mencionar que todo es bajo el nombre del Señor Jesús, porque todo lo que pidiéramos en su nombre, Él lo hará.
Nunca dejes de lado la oración, debemos como cristianos entender, que es la única forma que tenemos para acercarnos confiadamente al Trono de la Gracia. Es la oportunidad que tenemos para acercarnos a Aquel que dio su vida por nosotros y desea tener una relación individual con cada uno de sus hijos.
Si hay algo que nos perturba, si nos quita la tranquilidad, el reposo, si deseamos protección, sabiduría en nuestro trabajo, si deseamos agradecer por lo que tenemos. La única manera que tenemos para que el Padre nos escuche, es la oración.
Una de las razones por las que Cristo murió en una cruz por nosotros, es para que, pudiéramos deleitarnos en la presencia de nuestro Padre, sin necesitar a un sumo sacerdote o hacer rituales para poder ser dignos de esa maravillosa presencia.
Es otro de los grandes regalos que nos dejó nuestro amado Jesucristo y que no podemos desaprovechar ninguno de nuestros días. Cree en Cristo con todo tu corazón y ámalo con todo tu ser y las demás cosas serán añadidas.
Estoy segura que este post será de gran bendición para tu vida a partir de este momento; disfruta de la presencia de Dios.
Por último, te comparto este audiovisual con un Salmo para que tu noche sea en paz, seguridad y bendición por el Espíritu Santo.