Todo cristiano está llamado a ejercer obras de misericordia, es decir debe estar siempre dispuesto a sentir compasión por el sufrimiento y las miserias ajenas. Para ello se deben manifestar tanto las del tipo corporal como las espirituales, entra y conoce cuales son cada una de ellas.
¿Que son las obras de misericordia?
La misericordia es la voluntad que manifiesta una persona a sentir compasión del padecer y las infelicidades de sus semejantes. Cuando una persona es movida a misericordia demuestra amabilidad, presta ayuda al necesitado, no guarda rencor y perdona, es reconciliador, entre otras obras. Todas estas acciones u obras de misericordia son de agrado a Dios y por ende una vía de acercamiento a él. Jesús hace el llamado a su pueblo a ser misericordiosos en todo tiempo, como lo dice en:
Lucas 6:35-36 (RVR 1960): 35 Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. 36 Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.
Por tanto para el cristiano más allá de un sentimiento, la misericordia debe ser un atributo constante. A fin de reflejar el carácter de Cristo, que es benigno y misericordioso.
Por su parte desde la etimología de la palabra, esta proviene de la conjunción de tres raíces latinas misere, cordis e ia. Las cuales en su transliteración significan: Necesidad, corazón y a los demás. Lo que se traduce en que misericordia tiene un significado de volcarse o darse a los demás de corazón. El obrar con misericordia es ser solidario con aquellas personas que padecen alguna necesidad.
Todo cristiano tiene como fundamento imitar la misericordia de Dios, a través de obras. Estas obras de misericordia pueden ser corporales y espirituales. Las corporales procuran el bienestar físico de los demás y las espirituales, buscan brindar el apoyo espiritual a los otros.
¿Cuáles son las obras de misericordia corporales?
Las obras de misericordia corporales son aquellas acciones por medio de las cuales se puede ayudar o asistir a los semejantes en las necesidades para el bienestar de sus cuerpos, las cuales consisten principalmente en:
Suplir las necesidades de comida y bebida
Una de las obras de misericordia corporal es dar de comer al que padece hambre, así como dar de beber al que tiene sed. Proveer de alimento al que no lo posee es una obra que agrada a Dios, si se hace de corazón, porque es una forma de glorificarlo. Las iglesias cristianas promueven entre sus congregantes la recolección de alimentos y bebidas a fin de distribuirlos con los más desfavorecidos.
Esta es una labor del pueblo de Dios que viene a ser como la multiplicación de los panes, cuando Jesús sintió compasión por la muchedumbre que lo seguía. Sobre este hecho prodigioso de Jesús, te invito a que leas el artículo: La multiplicación de los panes según la Biblia. Donde se manifiesta que el Señor es un Dios de milagros, y que ante cualquier necesidad podemos tener la certeza de que siempre él va a obrar a nuestro favor y según los propósitos eternos que tenga con cada uno de nosotros.
Dar posada al peregrino
Dar posada al peregrino es un deber cristiano que demanda la palabra de Dios, como se puede leer en:
Hebreos 12:28 (RVR 1960): Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia;
Hebreos 13:1-2: 1 Permanezca el amor fraternal. 2 No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.
Actualmente, el cristiano demuestra ese amor fraternal dando posada a los hermanos que vienen de visita de otras regiones, mostrando así la fraternidad que nos une como pueblo de Dios. Porque en Cristo somos un solo cuerpo, sobre esto te invitamos a leer el siguiente artículo: La iglesia es cuerpo de Cristo: Significado. En él encontrarás lo que significa la expresión la iglesia cuerpo Cristo. Un tema de gran importancia dentro del cristianismo.
Vestir al desnudo
Un cristiano puede actuar con obra de misericordia corporal donando a quien lo necesite ropa y calzado que ya no use y que se encuentre en buen estado. Es mucho el prójimo que no tiene los recursos para comprar vestido y calzado. Las iglesias cristianas hacen la labor de recolección entre los hermanos para luego hacerlos llegar a aquellos que más lo necesiten.
Visitar al enfermo
El cristiano debe estar presto para consolar y dar ánimo a las personas en situación de enfermedad. Esta obra de misericordia corporal es también un acto de amor hacia el prójimo. Visitar a un enfermo es una oportunidad de mostrar a Cristo en nuestras vidas y de hacer llegar su mensaje, así como de orar por la salud de ellos.
Las iglesias cristianas por tradición promueven campañas evangelizadoras en centros asistenciales a fin de llevar ánimo y consuelo a los enfermos a través de la palabra de Dios.
Visitar a los presos
Una forma de mostrar misericordia con las personas que están privadas de su libertad es llevando alimento espiritual. Son muchas las personas que han llegado a los pies de Cristo estando presos. Por esto, al igual que las campañas evangelizadoras para los enfermos, las iglesias cristianas también las realizan para con los presos. Recordemos lo que dice la palabra de Dios en
Hebreos 13:3 (PDT): 3 Acuérdense de los que están en la cárcel, como si ustedes también estuvieran encarcelados con ellos. Tampoco se olviden de los que sufren, trátenlos como si ustedes mismos pasaran por el mismo sufrimiento.
Finalmente de todas estas obras de misericordia corporales habla Jesús en el pasaje sobre como el Hijo del hombre juzgará a todos, en:
Mateo 25:31-46 (PDT): 35 Porque tuve hambre y ustedes me dieron de comer. Tuve sed y me dieron de beber. Fui extranjero y me hospedaron. 36 No tenía ropa y ustedes me vistieron. Estuve enfermo y me cuidaron. Estuve en la cárcel y me visitaron”.
37 »Entonces los que hacen la voluntad de Dios le preguntarán: “Señor, ¿cuándo vimos que tenías hambre y te dimos de comer? o ¿cuándo te vimos con sed y te dimos de beber? 38 ¿Cuándo te vimos sin tener dónde quedarte y te invitamos a nuestra casa? o ¿cuándo te vimos sin ropa y te vestimos? 39 ¿Y cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y te visitamos?”
40 Entonces el rey les responderá: “Les digo la verdad: cada vez que ustedes hicieron algo por mis hermanos más humildes, también lo hicieron por mí”.
Las obras de misericordia espirituales
En las obras de misericordia espirituales el Señor Jesucristo quiere que copiemos la misma misericordia de Dios, como lo dice el pasaje del evangelio de Lucas 6:35-36, citado anteriormente. Porque desde la naturaleza del hombre obrar con misericordia, con alguien que no lo merece es imposible hacerlo. Es necesario que el cristiano se revista del Espíritu Santo para poder ver en el prójimo a Cristo y sentir compasión.
De la misma forma como Dios tuvo compasión, que aun sin merecerlo, solo por su gracia, entrego a su hijo amado para salvar al mundo del pecado. Y aunque nadie humanamente pueda salvar a nadie, si se puede glorificar a Dios demostrando bondad hacia los demás, independientemente de cómo sea su trato. Las obras de misericordia espirituales permiten al cristiano dar de gracia lo que por gracia recibimos de Dios.
Dios a través de las obras de misericordia espirituales, quiere que su pueblo confié en su justicia. Tratando a los demás, sean amigos o enemigos de la misma forma como nos gustaría que nos trataran, con misericordia. Entre estas obras se pueden mencionar:
- Llevar la palabra de Dios al que no la conoce
- Dar buen consejo al que lo necesite
- Corregir al que se equivoca
- Perdonar al que nos ofende
- Dar consuelo al que esta triste
- Tolerar con paciencia los defectos de los demás
- Orar por los demás
Obras de misericordia para niños
Las obras de misericordia tanto corporales como espirituales es importante sean inculcadas por los padres a sus hijos desde que son niños. De esta forma se formaran en el carácter de ellos cuando sean hombres y mujeres adultos. La mejor forma de hacerlo es con el ejemplo, que los hijos vean en sus padres actitud de misericordia para con los demás.
Para finalizar te invitamos a leer el artículo: La parábola de la oveja perdida de Lucas número 15. Esta parábola nos enseña que Dios siempre está al cuidado de sus hijos. Dios se alegra cuando uno de sus hijos vuelve a sus brazos.