Hemos llegado a un punto donde el deterioro que se le ha causado al plantea comienza a pasarnos factura a todos, al extremo de poner en pelogro la vida de millones de personas, con inundaciones o terribles sequías. Por eso en este post te contaremos cuáles son algunas de las soluciones para la contaminación atmosférica.
Causas de la contaminación atmosférica
Instrucciones especializadas y muy serias definen la contaminación atmosférica como el daño que se le causa al aire que respiramos.
Para ser más precisos citaremos el concepto que maneja el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia:
«La Contaminación Atmosférica es el fenómeno de acumulación o de concentración de contaminantes, entendidos estos como fenómenos físicos o sustancias o elementos en estado sólido, líquido o gaseoso, causantes de efectos adversos en el medio ambiente, los recursos naturales renovables y la salud humana que solos, o en combinación, o como productos de reacción, se emiten al aire como resultado de actividades humanas, de causas naturales, o de una combinación de estas».
De tal manera que nos hallamos en presencia de uno de los problemas más relevantes a los que se enfrenta la humanidad: la supervivencia de la especie y del mundo.
La amenaza se debe a que los elevados niveles de contaminación, aunado a las nocivas prácticas de desarrollo han hecho que, actualmente la Tierra ya no sea el acogedor hogar que alguna vez fue, tanto para el hombre como para todas las especies que la habitan.
Pero la Organización Mundial de la Salud también tiene una opinión importante sobre este asunto, que estimamos importante transmitirte:
«La contaminación del aire representa un importante riesgo medioambiental para la salud. Mediante la disminución de los niveles de contaminación del aire los países pueden reducir la carga de morbilidad derivada de accidentes cerebrovasculares, cánceres de pulmón y neumopatías crónicas y agudas, entre ellas el asma.»
Estamos a tiempo
Como puedes ver, la advertencia de peligro va ligada a una importante recomendación que podemos leer entre líneas de la siguiente manera: debemos trabajar para evitar el desastre que se nos avecina.
Pero además nos dan la OMS emite algunas recomendaciones, ya que sobre el mismo punto agrega información para la disminución de emisiones originadas por el empleo, por ejemplo, del carbón y la quema de desechos agrícolas.
Esto favorecería la reducción de importantes fuentes de contaminación del aire, especialmente en áreas adyacentes a las ciudades y zonas rurales de los países en desarrollo.
No obstante las sugerencias y las esperanzas que estas despiertan, no debemos restar importancia al asunto, porque la verdad es que estamos frente a una situación muy grave.
El origen del mal
Debemos comenzar ubicándonos en el origen del problema. Así, nos encontramos con que entre las causas principales de esta grave amenaza se destaca la contaminación atmosférica. Es un problema que muestra un alarmante aumento en las últimas décadas.
Es que la industrialización nos ha hecho la vida más llevadera de diferentes formas, aunque a la par ha propiciado una elevadísima acumulación en la atmósfera de gases de efecto invernadero, así como otros problemas que se derivan de este fenómeno.
La acumulación de estos gases en la atmósfera es tal, que ha generado la aparición de colosales grietas en la capa de ozono. Se trata de un problema que a su vez propicia otros eventos de importante impacto nocivo, tal es el caso del cambio climático y el calentamiento global.
Pero son muchas más las causas de la contaminación atmosférica y algunas de ellas podemos resumirlas en una breve lista. Veamos:
Explotaciones mineras
Muchos minerales son extraídos mediante la utilización de elementos químicos y el empleo de maquinaria pesada.
De tal manera que estos procedimientos contaminan el aire con polvo y gases. Pero igualmente la explotación causa irremediables daños en los entornos, en uno pocos casos.
Empleo de pesticidas en la agricultura
Tan conocidos como nocivos resultan ser los productos de origen químico que se usan con frecuencia en las prácticas agrícolas.
Los más conocidos son los empleados para controlar las plagas y en la fertilización, un terrible grupo que suele venir en diferentes composiciones que siempre ocasionan un enorme daño a los suelos, al tiempo que incrementan la acumulación de gases en el aire.
Esta es la razón por la cual actualmente se exhorta tanto por la implementación de labores ecológicas en los cultivos. En otras palabras, la idea es que los productos que se generen de la actividad, así como los suelos y el aire queden libres de todo químico.
Industrialización excesiva
El incremento del número de empresas fabriles y el consumismo masivo, representan otra de las causas de la contaminación de la atmósfera. Mientras más elevada sea la demanda de productos, mayores han de ser los perniciosos efectos para el planeta.
Quema de carburantes
Los medios de transportación tradicionales queman una elevadísima cantidad de carburantes, los cuales se transforman en gases. Se trata de algo que igualmente impacta en la pureza del aire que alimenta nuestros pulmones.
La tala indiscriminada
Ante la escasez de Tipos de Suelo aptos para la agricultura, se genera la nociva práctica de la tala indiscriminada o deforestación, lo que obviamente reduce la cantidad de árboles.
Pero esto a la vez impide que un buen volumen de esos gases contaminantes que van poco a poco dañando el oxígeno, puedan ser contrarrestados para que así se depute el aire. Esto se debe a que son precisamente los árboles los encargados de tal función.
Soluciones para la contaminación atmosférica: las políticas
Una vez conocidas las causas, corresponde el turno a las soluciones de tan peligrosa amenaza y, como es de esperarse, estas se inician por las políticas que deben adoptarse con la urgencia del caso.
De tal manera que debemos ver las políticas dirigidas a la disminución de la contaminación del aire, como un valiosísimo instrumento para progresar sobre este objetivo.
No obstante, son múltiples las dificultades que tratan de impedir que alcancemos la meta. Entre estas dificultades hay que mencionar en primer lugar el aspecto social que rodea al tema.
En tal sentido diseñar políticas tendentes a una mejor calidad ambiental siempre resulta complejo, por decir lo menos.
Aun así no hay duda de que sin la debida colaboración institucional de orden mundial, además de sus actores regionales, nacionales y locales, muy poco podría lograrse sobre el particular.
En la actualidad el panorama se muestra favorable en este sentido, pero no sólo por importantes acuerdos multinacionales alcanzados, como por el ejemplo el de París, el cual nos llena de optimismo respecto a un mundo menos contaminado.
También fortalece la lucha una creciente concientización mundial.
Debido a la acción de grupos activistas e instituciones del mismo corte (varias ONG’s y la ONU), que buscan encender las alarmas con respecto a la necesidad de proteger el medio ambiente, el mundo a prestar verdadera atención al tema.
Los resultados demandan paciencia
Pero estas alertas se han dado a la par de los progresos científicos, que arrojan luces sobre lo pernicioso que resulta la contaminación atmosférica para la salud de los seres humanos y del mismo planeta.
Como resultado de estas iniciativas, también ha tomado mayor relevancia la lucha contra el cambio climático y, de tal manera, se fortalece la búsqueda de la reducción del CO2 de la atmósfera, además de otros gases de efecto invernadero.
Claro que esto representa elementos conformantes de la solución. No obstante únicamente esto se concreta en resultados cuando viene de la mano de acciones tendentes a minimizar el CO2. Aunque puedan parecer en principio tímidas, siempre que sean persistentes.
De esta manera pronto crecerán sumando voluntades y se verán fortalecidas con el tiempo.
Pero siempre amparadas por las reglas que rigen las descargas polucionantes, hasta los resultados de novedosos ingenios que ayuden a minimizar el menoscabo de la calidad del aire.
Esto puede darse desde el aspecto más general, tal como sucede con las energías limpias o verdes, o bien en áreas más específicas.
Entre otros, este resulta ser el caso de la Smog Free Tower, una inmensa estructura que se edificó en Róterdam con la finalidad de atrapar smog.
Así, unos y otros elementos se van sumando para el objetivo. Colaboran para vencer a esa pareja de males que integran la transformación climática y la insalubridad del aire. Sin embargo aún estamos lejos de alcanzarlo.
Velar por los bosques: solución para la contaminación atmosférica
Pero más allá de las mejoras de las políticas medioambientales, debemos dar respuestas a una pregunta básica para resolver el problema: ¿cómo evitar contaminar el aire o prevenirla?
Resulta que el tema no debe ser únicamente la reducción de la contaminación ya existente, sino que debe ser extensivo a la prevención y el crecimiento de la misma a nivel mundial. Un punto básico en este sentido es cuidar los bosques de todo el planeta.
De tal manera debemos entender que tanto para impedir o disminuir la polución, hay que velar por los bosques, lo que incluye parques naturales y jardines, así como las áreas verdes de las ciudades, además de las algas y otras plantas acuáticas.
No debe quedar duda que el fortalecimiento y la protección de los espacios naturales, es parte relevante del resultado que buscamos.
Esto debe llevarse a cabo desde los llamados pulmones del mundo, como la Amazonia, hasta las áreas urbanas verdes. Incluso deben tomarse en cuenta las plantas ornamentales en casas u oficinas.
Pero esto no es sólo porque las plantas renuevan el oxígeno, sino debido a que igualmente son útiles en la absorción de CO2. Una característica que comparten los océanos y otros colosales sumideros de carbono, por lo que de la misma manera representan una alternativa complementaria para depurar el aire.
En este sentido no debemos olvidar, que los mares y océanos igualmente demandan protección. De esta manera vamos respondiendo a esa inquietud de cómo evitar la contaminación atmosférica.
Huella de carbono y ecología como alternativa
También resulta pertinente entender que no únicamente las industrias contaminan, que nosotros, las personas, igualmente contribuimos a las emisiones contaminantes.
De tal manera que si bien se necesita actuar a gran escala con políticas a nivel gubernamental y empresarial, igualmente las personas debemos poner de nuestra parte para proteger el entorno y su salud, algo que es patrimonio de todos.
Así que te mostraremos algunas soluciones para la contaminación atmosférica, que podemos poner en práctica quienes sentimos algún grado de compromiso con el futuro de nuestra especie. De tal manera que estas medidas son más a nivel individual que las anteriores.
Aunque no por ello son más complicadas, sino todo lo contrario. Veamos.
Ventilar la casa y limpiar el aire
Son numerosas las vías que nos permiten contribuir con tan importante causa. La tecnología es una de ellas y puede convertirse en nuestra mejor aliada para mejorar la polución del oxígeno en espacios cerrados.
De allí viene la idea de ventilar nuestra casa diariamente por alrededor de diez o quince minutos. Esto para reemplazar el aire del interior, que generalmente está más contaminado que el de afuera.
Pero a la par de esta práctica, se recomienda emplear bien sea extractores o aspiradores, incluso purificadores del aire de gran eficiencia. Todos estos aparatos se encuentran en el mercado con mucha facilidad y a bajos costos.
Plantas para purificar el aire
Muchos de estos equipos a los que hemos hecho referencia, mezclan variadas tecnologías para obtener mejores resultados.
Pero igual que estos equipos, pueden ayudarnos las plantas del jardín. Aunque también sirven las que tenemos en el balcón o hasta dentro de la casa.
Esto se debe a que funcionan como filtros naturales de aire, con base en el carbón vegetal, un elemento que dispone de un poder de absorción colosal.
Producir menos humo en casa
En relación a las buenas costumbres, podemos decirte que éstas resultan de elevada importancia. Con ellas se pueden dar soluciones que terminen con la polución de aire en áreas interiores.
En este caso el agente contaminante puede ser el tabaco, así que está en tus manos dejar de fumar. Seguro que tus pulmones como el planeta te lo agradecerán.
Pero además debes intentar reducir el humo que genera tu chimenea. Para esto basta con hacerle mantenimiento constante.
Lo mismo aplica para los fogones y la calefacción, incluso a objeto de impedir una intoxicación de monóxido de carbono.
Limpiadores ecológicos
Igualmente es aconsejable emplear con cautela los productos de aseo tradicionales con base química artificial. Pero especialmente se recomienda no mezclarlos.
Lo ideal sería cambiarlos por limpiadores ecológicos y de esta manera prescindir de ambientadores artificiales.
Lo mismo se aconseja con los productos insecticidas.
No obstante lo primero es seguir al pie de la letra las instrucciones del fabricante.
Más la bicicleta y transporte público
Otra de las posibles soluciones para la contaminación es el empleo de los medios de transporte amistosos con el ambiente. Esta es una de las mejores formas de colaborar para que todos dispongamos de un aire más puro.
Las posibilidades son variadas. Podemos escoger la bicicleta para desplazamientos cortos, u optar por el tren antes que el auto y que el avión para trayectos largos.
Así mismo, al momento de disminuir el empleo del auto, podemos compartirlo viajando con otras personas que vayan en la misma dirección. Pero mejor aún, de ser posible, es trabajar en nuestro hogar.
Puedes darte cuenta en cada caso habrá un relevante componente conservacionista. De esta forma podrás reaccionar, dependiendo de cómo decidas, amistosamente con el entorno.
En resumen, se trata de asumir posiciones reflexionadas, teniendo siempre en consideración el factor ecológico. Entre tantos otros aspectos que se presentan en conjunto.
Así que no es obligante que sea el único. No obstante el solo hecho de tomarlo en cuenta y ejecutarlo en la medida de lo posible dentro de nuestra realidad actual, es de por sí un gesto eco-amigable. Esto supone un colosal paso de avance para un futuro prometedor.
Reutilizar y reciclar en casa
Otra de las buenas soluciones para la contaminación atmosférica, es saber cómo controlar mejor los residuos que producimos.
Este consejo viene acompañado por tres amigos verdes. Al grupo suele dársele el nombre de las 3R: reducir, reutilizar y reciclar.
Esto lo que nos quiere decir en principio, es que tenemos que reducir a lo necesario el volumen de lo que adquirimos. Con esto igualmente bajamos la quema de carburantes empleados para mover y hacer que funcionen las fábricas. Lo que también reduce los desechos y la contaminación, evidentemente.
Luego viene la R de Reutilizar las cosas. No comprar cosas nuevas si aún tenemos algo que puede cumplir la misma función. Seguro sirve estando un poco viejito. Esto también tiene un efecto importante en el consumo de energía.
Ya por último se refiere al Reciclaje de basura, tan importante y afortunadamente cada vez más empleado en todo el mundo.
Como puedes ver, son muy sencillas las soluciones para la contaminación del aire. Así que te invitamos a ponerlas en práctica.