¿Estás pasando por una etapa emocional un poco lúgubre, vacía y sin sentido sin conocer por qué? Decir me siento sola puede ser una expresión pesada pero, es el primer paso para marcar una diferencia en tu vida. Aprende en este artículo que hacer ante este sentimiento.
Me siento sola o triste
El sentimiento de soledad es algo que no se le desea a nadie bajo ninguna circunstancia. La necesidad de tener allegados presentes que te apoyen y te demuestren afecto en cualquiera de sus formas de expresión es esencial para tu bienestar emocional.
Si te sientes sola o solo, es posible que se trate de la pérdida de un amigo o ser querido que siempre estaba para ti en momentos pasados. Puede tratarse de aislamiento social, de sentirse excluido, inadaptado, o creer que nadie te presta el apoyo emocional que necesitas para ver que puedes superar una etapa difícil.
Al sentirte solo, tienes más tiempo de visualizar pensamientos negativos, dudar de ti como persona y de sentir que el amor que tus seres queridos tenían por ti se ha desvanecido. Es por ello que la soledad es un sentimiento tan difícil de controlar que afecta cualquier aspecto emocional de tu vida y la forma en que ves tus relaciones.
Sin embargo, la soledad puede ser comprendida en muchas formas y considerada como una gran complemente de tu humanidad e independencia. La soledad es un sentimiento complejo, que puede verse desde un punto de vista negativo o gratificante; esto depende de ti y solo de ti.
Los momentos en donde sólo te tienes a ti misma requieren un mayor grado de madurez. Es necesario saber cómo aceptarla y domarla para que puedas crecer espiritualmente.
¿Por qué me siento sola?
Lo más probable es que te hayas hecho esta pregunta una y otra vez en los momentos más difíciles de tu soledad. La respuesta a este sentimiento no es concisa y varía de persona en persona.
Falta de apoyo emocional
En la mayoría de los casos las personas se sienten solas porque pasan por un momento de extrema dificultad, sin tener a nadie presente a su lado recordándole el valor de la lucha y entregándole el afecto y cariño necesitado para vencer el problema.
La ausencia de algún apoyo emocional puede hacerte bastante mal si estás pasando por circunstancias difíciles y necesitas alguien con quien desahogarte. El no tener a esa persona que te preste un apoyo incondicional para compartir tu peso puede generar un gran vacío, sin embargo, puedes cambiar eso siguiendo estos consejos:
- Intenta comunicar tus sentimientos: Quizá existan personas dispuestas a estar contigo en los peores momentos, pero no están conscientes de las dificultades que tratas cada día. Es por ello útil que expreses tus sentimientos, pierdas el orgullo y te comuniques con tus seres queridos.
- Abre tus emociones a la ayuda: Es probable que existen personas que estén intentando ayudarte y no te des cuenta. Al estar cerrada emocionalmente no te permites recibir el apoyo y la ayuda que te están dando.
- Intenta cambiar tu grupo social: Quizá no te hayas rodeado de las mejores personas. Es mejor que te cuestiones quiénes son tus amistades para rodearte de personas a quienes les importe tu bienestar emocional y espiritual.
- Sé tu propia compañía: Puede llegar a ser un poco peligroso depender de otras personas para sanar tus propias emociones. Intenta generar un cambio desde adentro para corregir esa dependencia a otras personas.
Es posible que problemas entre tu pareja y tú te hagan sentir que estás sola. Esto incluso puede tener raíz en el ámbito sexual. Descubre aquí sobre sexo y sexualidad.
Aislamiento social
Ya sea por sentimientos reprimidos, miedo, baja autoestima o resentimiento, el aislamiento social es una consecuencia que puede llegar a ser frustrante para ti.
Quizá las relaciones interpersonales no se sienten iguales debido a todos estos sentimientos y es aún más difícil cuando prefieres interactuar un poco más con tu entorno para no sentirte sola.
Es posible que incluso la causa de tu aislamiento tenga que ver más con tu carácter que con tus emociones. Si eres una persona introvertida quizá te sea complicado encontrar un punto medio entre que la comunicación, las actividades sociales y tu propia privacidad e intimidad.
Sin embargo, si te sientes sola a causa de tus habilidades para socializar o tu miedo de abrirte ante otras personas, debes dar una segunda oportunidad a situaciones o contextos sociales que te permitan conocer o estrechar lazos con personas nuevas.
Es muy importante que conozcas que tipo de personas debes elegir para sentirte cómoda y abierta a expresar tus emociones de manera sana.
No debes forzarte a ceder un puesto en tu círculo social a alguien si no te sientes completamente seguro de ello. Independientemente de si eres de carácter extrovertido o introvertido, debes ser consciente de solo aceptar en tu círculo íntimo personas dispuestas a apoyarte y causarte bien.
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Tienes que tomar las riendas de tu vida. Sin importar que tanta comodidad te transmitan los eventos sociales o los contextos en donde compartes con gente, es tu deber eliminar de ese aspecto de tu vida oda aquella energía negativa que te sea desfavorecedor para la confianza que puedas tener en tu mismo.
Si te sientes renuente a asistir a eventos, reuniones, o a compartir tiempo con allegados para repeler el sentimiento de soledad, también puedes encontrar alternativas para sentirte feliz, llena y completa por ti misma.
Aislamiento emocional
Las emociones no se deben esconder o reprimir. Puede que seas una persona relativamente reservada que no siente mucha comodidad en expresar sus emociones, e incluso de esa manera, es necesario que encuentres una forma de desahogar esas emociones que se acumulan como energía negativa en tu mente y alma.
Cuando los sentimientos son ahogados generan un peso bastante amargo en tu vida; quizá tu manera de percibir las cosas se vea afectada por la negatividad, tu estrés se dispare por completo y empieces a desconocer cómo tratar dichas emociones por ti mismo.
Durante tu confinamiento social puedes encontrar hobbies como lectura y meditación o hacerte cargo de deberes que mantengan tu mente ocupada y entretenida. Puedes aprovechar tu tiempo a solas para concentrarte en cualquier cosa que te ayude a crecer emocionalmente y cambiar la reacción ante la soledad desde adentro.
Por otro lado, el aislamiento emocional es mucho más difícil de manejar. La represión de sentimientos debido al miedo, la pena o la inseguridad que al final, termina haciéndote más daño internamente, incluso la vergüenza ante tus propios conflicto causa la incapacidad de desahogarte con alguien de suma confianza y por ello, vienen los problemas de autoestima.
El mayor complejo que puedes tener a la hora de querer expresar el cómo te sientes es sentir que no existe alguien de confianza que valore dichos sentimientos y que valide tus emociones. Pueden existir personas apáticas que tienden a menospreciar los sentimientos de los demás y es justo de ello que debes alejarte.
Rodéate de personas que te presten la confianza suficiente para desahogarte y compartir un poco del peso que llevas. Ten seguridad de que existen personas especiales a las que les importa escucharte y estar presentes para ti sin presionarte ni menospreciarte.
¿Qué hacer si me siento sola?
El tiempo en tu propio espacio y con tu propio ser te puede ayudar a aprender numerosas lecciones sobre tu vida. Aprender a desarrollar una percepción propia de las cosas es relativamente importante para tu desarrollo personal y emocional; conocer a solas tu entorno, tus ocupaciones, meditar sobre tu propio ser interior y aprender sobre ti misma en aquellos momentos.
Si te sientes sola quizá te sea de gran ayuda usar tu tiempo para encontrar nuevos pasatiempos, crear nuevas ideas, elaborar nuevos proyectos y encender pensamientos de ayuda en tus emociones.
Sin embargo, la soledad más que un contexto es un sentimiento, así que te preguntarás quizá ‘‘¿Qué hacer cuando me siento sola?’’.
Primero debes cuestionarte la razón por la que te perturba tu soledad y qué tipo de soledad sientes. Aun cuando tienes compañía en casa, la interacción puede parecer vacía o nula, así como también puedes estar sola en casa y sentir que solo quieres de vuelta a esa persona que extrañas tanto.
Si es el caso de que quieres hablar, compartir o interactuar con personas que te hagan sentir amada y que te permitan hablarles de tus sentimientos, es momento de que pierdas el miedo por conocer experiencias nuevas para empezar a explorar ideas desconocidas, renueva tu entorno y haz amistades sanas y de confianza.
Aprende sobre ti en el momento en que estás aislada y comprende tus emociones antes de sacarlas al mundo, recuerda que nadie es responsable de tus sentimientos más que tú misma. Sé capaz de levantarte y responder tus dudas internas por tu propia cuenta para poder tener una mejor interacción con el exterior.
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Aceptar la soledad como una virtud
La soledad no tiene razón para verse como algo malo. Jamás es sano que dependes de una persona o grupo social para sentirte bien u olvidar tus problemas internos. Lo especial de la soledad es que te pone a ti misma a enfrentarte a aquellas cosas que tienes que reparar y sembrar en tus emociones y tu carácter.
Posee tu soledad para evitar que te posea a ti. La próxima vez que digas »¿Por qué me siento sola?» no se sentirá como un peso. Disfruta tu tiempo a solas y disfruta también sus interacciones pero sobre todo, aprende a sonreír contigo misma.
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