La llamada hormona del parto y de la lactancia, es la oxitocina, pero… ¿eso implica que solo está presente en las mujeres? La respuesta es que no. También se la conoce como la hormona del amor y tanto mujeres como hombres se ven afectados por ella y, por tanto, la producen.
Si quieres saber qué es esta hormona y como afecta a los hombres además de a las mujeres, sigue leyendo este artículo porque te lo contamos todo sobre ella.
¿Qué es la oxitocina?
Es una hormona secretada por la hipófisis o glándula pituitaria. La oxitocina tiene la función de provocar contracciones uterinas y estimular la subida de la leche en las mujeres embarazadas. Esta función es la que también contiene cuando es administrada mediante una inyección intramuscular o intravenosa, ya que incita el parto en aquellas ocasiones necesarias. Otro dato importante es que es precisamente la oxitocina la que controla la hemorragia postparto, por lo tanto es una hormona fundamental para las mujeres que quieren ser madre. Todo ello como una función fisiológica, pero además también tiene funciones neurológicas, influye no solo en nuestro cuerpo sino también en nuestro comportamiento.
Esta es la conocida como hormona de amor, es la encargada del enamoramiento, de que nuestras relaciones sean duraderas, del apego entre padres e hijos, la empatía, la autoestima o la generosidad.
¿Cómo podemos aumentar los niveles de oxitocina?
La oxitocina la producen cosas muy sencillas del día a día como es reír, llorar, pasar tiempo con quienes queremos, tener relaciones sexuales, meditar, acariciar a nuestra mascota, darnos abrazos, etc… No por nada es también denominada la hormona del amor, aumentan los niveles en nuestro organismo al sentir las caricias de quienes queremos y al llegar al orgasmo.
La forma de aumentar esta hormona en nuestro organismo parece simple ¿verdad? Además, el consumo de algunos alimentos también favorece la estimulación de esta hormona, como por ejemplo: el romero, el perejil, la hierbabuena, el chocolate o la leche animal.
Dura solo 3 minutos en nuestro cuerpo
Quizá parece poco tiempo, pero 3 minutos es exactamente lo que dura la oxitocina en nuestro organismo después de su liberación. Sin embargo, tiene efectos duraderos en aspectos muy importantes de la vida.
Así que es el momento de querer y dejarse querer por nuestras parejas, hijos, padres, amigos y mascotas. La oxitocina se activa con aquellos actos o actividades que nos resultan placenteras.
La oxitocina y el sexo
Hemos comentado la importancia que tiene esta hormona en el momento del parto, pero no solo interviene en el cuerpo de la mujer en ese momento, sino que es una de las hormonas principales para provocar la excitación sexual y los orgasmos tanto en mujeres como en hombres.
Los niveles de esta hormona aumentan durante las relaciones sexuales y todavía más durante los orgasmo. Durante el orgasmo femenino es la responsable de producir contracciones uterinas que ayudan a transportar el esperma hacia el óvulo para que la concepción sea más fácil. Durante el orgasmo masculino provoca contracciones en la próstata y en las vesículas seminales.
La oxitocina, es la que permite que el hombre mantenga sus erecciones. Durante la eyaculación los hombres desprenden ciertas sustancias químicas como la hormona de la que estamos hablando, las cuales hacen que el vínculo afectivo con la pareja se intensifique. Junto a la dopamina y la norepinefrina, es también la responsable de las relaciones de larga duración, ya que hacen que después de practicar sexo aflore un sentimiento de vinculación hacia la otra persona.
Comentábamos que la oxitocina dura 3 minutos en el cuerpo, pero sus efectos pueden durar hasta tres horas, es por ello que después de practicar sexo nos sintamos mejor durante un rato.
Otros estudios o beneficios de la hormona del amor
Algunos estudios han relacionado la hormona del amor con una ayuda eficaz para combatir el miedo, la depresión, la anorexia e incluso mejorar el autismo.
Efectos sobre el hombre
Otros estudios reflejan como hombre heterosexuales, después de inhalar oxitocina y exponerse a visualizar diferentes fotografías de mujeres entre las que se encuentra la de su pareja, revelan mayor actividad en las regiones de recompensa del cerebro justo en el momento de ver a su pareja.
Este estudio revela que la oxitocina hace que los lazos románticos y de unión de los hombres hacia su pareja sean muy fuertes y que perciban a su pareja como más atractiva y valiosa a otras mujeres.
Si miramos al pasado lejano, esta hormona tuvo un papel fundamental, ya que es la que mantenía al hombre junto a la mujer y sus hijos para protegerlos de otros hombres. Y es, por tanto, la que incita la monogamia. Por todo ello, también estamos ante la responsable del anhelo que sienten muchas personas después de una ruptura.
Precisamente para tratar los desamores se esta investigando si suministra oxitocina podría ser beneficioso o todo lo contrario. Pero para saberlo, habrá que esperar a que se siga investigando.