La Estatua de la Libertad de Estados Unidos es todo un icono, además de ser considerado un tesoro nacional. Es una de las estatuas más reconocidas a nivel mundial y cada año más de 4.000.000 de personas aprecian la grandeza de este símbolo de libertad, inspiración y esperanza.
Si quieres saber más sobre la historia y el origen de la Estatua de la Libertad de Nueva York, a continuación te lo contamos.
¿Cuál es la historia sobre la Estatua de la Libertad?
En el año 1865 el francés Auguste Bartholdi tuvo la idea de hacer un regalo al pueblo de los Estados Unidos desde Francia. Este artista era un ferviente partidario de los Estados Unidos y deseaba conmemorar el centenario de la Declaración de la Independencia del país.
En aquellos años existe una estrecha amistad entre ambos países y se sintió conmovido por la reciente abolición de la esclavitud en los Estados Unidos. Este hecho fomentó los ideales de libertad e igualdad entre todos los ciudadanos de los Estados Unidos. El diseño de la estatua contenía mucho simbolismo como puedes comprobar. Además, su historia está intrínsecamente relacionada con la evolución de la libertad y el arte a lo largo de diferentes épocas, un tema que puedes explorar en nuestra sección sobre historia del arte.
¿Cómo se financió la Estatua de la Libertad?
Se recaudaron fondos y se hicieron numerosas aportaciones de capital privado para poder comenzar a crear la Estatua de la Libertad en Francia. Los franceses financiarían la totalidad de la escultura, mientras que el pueblo estadounidense financiaría el pedestal en el cual hoy en día se ubica en la Isla de Liberty Island.
Para recaudar fondos los franceses utilizaron diferentes medios para poder obtener el dinero, por ejemplo: organización de diferentes eventos públicos, una lotería o aportaciones de capital privado de parte de algunos empresarios franceses. Los estadounidenses por su parte, para financiar el pedestal, celebraron varios eventos benéficos y exposiciones de arte, que reflejaron el compromiso de la sociedad estadounidense con la causa de la libertad.
A pesar de todos los esfuerzos llevados a cabo por ambas naciones, reunir los fondos suficientes para poder construir el pedestal fue lento. En 1885 Joseph Pulitzer decidió publicar un anuncio en su periódico New York, en el cual invitaba a todos sus lectores a realizar donaciones para la causa. Finalmente, se consiguió recaudar unos 100.000 dólares y gracias a esta genial idea se construyó el pedestal de la estatua.
La construcción de la estatua finalizó en Francia en julio de 1884. Esta gran escultura se alzó sobre los tejados de París a la espera de su viaje por mar, un acontecimiento que marcaría un nuevo capítulo en la historia de la Estatua de la Libertad. Puedes encontrar más información sobre grandes monumentos en el Monte Rushmore.
En ese mismo año, el arquitecto Richard Morris fue seleccionado, entre muchos otros arquitectos de la época, para diseñar el pedestal de granito de la gigantesca escultura, que se convertiría en un símbolo de la arquitectura y el arte en el contexto de la historia de la Estatua de la Libertad.
El viaje de la Estatua de la Libertad
Para organizar el viaje transatlántico de la Estatua de la Libertad, la gran dama se redujo a 350 piezas individuales y fue embalada en más de 200 cajas.
El barco partió de Francia y llegó al puerto de Nueva York el 17 de junio de 1885. La estatua permaneció en piezas hasta que finalmente se completó la obra del pedestal en abril de 1886.
La historia de la Estatua de la Libertad y su isla ha sido una historia de continuos cambios. Durante muchos siglos la isla fue importante, ya que vivían nativos indios y posteriormente lo ocuparon los colonos holandeses. En 1807, el ejército estadounidense consiguió en la isla un puesto militar y construyeron un fuerte para proteger el puerto de Nueva York. Por este motivo, la creación de la Estatua de la Libertad es todo un símbolo para la isla, ya que han ocurrido muchos acontecimientos históricos en ella que han forjado el carácter de la nación, un tema que se puede ver también en mitos y leyendas.
La antorcha
El artista francés consideró que la antorcha no debería de estar encendida con fuego, ya que esto haría con el paso del tiempo que la estatua pudiera estar en peligro debido a la corrosión que podría provocar el fuego en los materiales originales.
Por ello, en su lugar se ha instalado una chapa de cobre maciza de color dorada para que brillara con la luz del día. Durante su primer medio siglo, la antorcha ha sufrido numerosas modificaciones. De hecho, cuando se inauguró la dama de la libertad en 1886, se cortaron dos filas de ojo de buey en el cobre de la parte inferior de la antorcha, para iluminarla desde el exterior y el interior, una decisión innovadora en la historia de la Estatua de la Libertad.
Unos años más tarde, un cinturón de cristal de 18 pulgadas sustituyó la fila superior de ojos de buey y se instaló una claraboya piramidal con cristal rojo, blanco y amarillo en la parte superior de la llama.
Los cambios continuaron hasta el año 1916, cuando se eliminó el cobre en su totalidad y fue sustituido por vidrio en color ámbar, mostrando así cómo ha evolucionado la percepción de la estatua a lo largo de los años, un proceso que también se observa en el arte hindú.
En 1931 se instaló un nuevo sistema de iluminación, que requería la realización de dos agujeros en la parte de la antorcha, a través de los cuales se instalaron varios proyectores emulando una llama.
Debido a las filtraciones de lluvia y la corrosión por el paso del tiempo, el 4 de julio de 1984, se sustituyó la parte de la antorcha original por una réplica.
¿Qué otros datos curiosos sabes sobre la Estatua de la Libertad de Nueva York?