Características del Río Sena: Historia, Ubicación y más

¿Quién no ha oído hablar del Río Sena?, o Seine en francés. Se trata del río más relevante y destacable de Francia, no sólo por su historia, el transcurso que realiza, el movimiento comercial que ha promovido y su gran atractivo turístico. Le invitamos a leer este artículo y a enterarse de más detalles sobre este majestuoso río.

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Historia del río Sena

La historia del Río Sena, en francés Seine, que antiguamente recibía el nombre de Sequana, es sin duda, una historia muy interesante, porque no sólo se relaciona con aspectos relevantes que tuvieron impacto en la fundación y desarrollo de muy conocidas poblaciones del continente europeo, sino que el propio río ha presenciado toda clase de sucesos y eventos que abarcan el catálogo de todas las posibilidades de la humanidad. Desde lo más excelso, como las letras y el arte, hasta los acontecimientos históricos más relevantes que han producido modificaciones en la forma de ser y de pensar.

Se podría decir que el Río Sena es tan conocido como el Nilo, o como el Río Amazonas y tan sublime como el Danubio y con tantos siglos de vivencias, ha sido el precursor del crecimiento exponencial que han tenido ciudades como París. Por ello, sus habitantes al referirse a al Ile de la Cité, han adoptado el lema relacionado con el Sena que la rodea, según el cual la ciudad flota, pero no se hunde.

Pero el Río Sena no sólo atraviesa París, ciudad para la cual ha sido de inspiración para numerosos puentes de ensueño que lo atraviesan, tanto peatonales como de tráfico de vehículos. El Sena atraviesa por muchas importantes ciudades de Francia, como Troyes, Melún y Ruán. Pero el destino del Sena es inseparable de la capital, París. Puede decirse que hay un nexo indestructible entre París y el Sena. De hecho, se dice que no existiría París misma sin él, pues los inicios de la ciudad luz pudieron ser posibles gracias al cordón de seguridad que extendía el Sena alrededor de la Ile de la Cité.

Nacimiento de París

París nació en esa isla, rodeada por el río, en la que los reyes de antaño construyeron sus castillos y sus templos, convirtiéndolos en fortalezas inexpugnables gracias a la protección del Sena. Son incontables las historias, mitos y leyendas que conforman la historia del Río Sena, y que confieren una existencia y un entorno poético y casi de novela. Tanto se ha escrito sobre sus riberas y los acontecimientos que lo han tenido como escenario, que se podría decir que en algunos momentos de la historia, el Sena ha cobrado vida propia.

Leyendas

Una de las leyendas asociadas con el Río Sena es que las cenizas de Juana de Arco, la famosa mártir francesa, fueron esparcidas en el Sena luego de haber sido quemada en la cruz por herejía en el año de 1431. El último deseo de Napoleón Bonaparte, expresado en su testamento, era que sus restos mortales fueran trasladados desde el Castillo del Elba, donde permanecía confinado, y fueran enterrados a orillas del Sena. Por supuesto, tal petición no fue cumplida.

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Pero no todo ha sido novelesco o actos de caballería. El Sena también ha sido testigo de actos de naturaleza brutal, como lo atestigua haber sido objeto de la invasión nazi durante la segunda guerra mundial, perdiendo a casi toda su población de fe judía y, más recientemente, la matanza de París, ocurrida en 1961, cuando el Prefecto de Policía arremetió contra una manifestación pacífica de argelinos residentes en esa ciudad, a los que se les conoce con el sobrenombre de franceses de pies negros, cuyas víctimas se ahogaron al ser lanzadas al río desde el puente Saint-Michel y otros lugares de la ciudad capital.

Segunda Guerra Mundial

Volviendo a la Segunda Guerra Mundial, el Río Sena fue el eje fundamental por el que los aliados en contra de Alemania pretendían invadir Francia. Así se hizo y se llamó la Operación Overlord. De acuerdo a los planes, sólo les tomaría 90 días a los aliados invadir Francia y desalojar al ejército alemán, usando el Sena como principal vía de transporte en 1944. Pero la historia reflejó que no sólo la operación tuvo éxito, sino que además, el éxito fue rotundo, porque lograron los objetivos en mucho menos del tiempo en el que se había pensado, debido a la huida el ejército alemán en el mes de agosto de ese año.

Arte, Ingeniería y Arquitectura

El Río Sena no sólo ha llevado a cabo el rol de inspirador para grandes obras artísticas y literarias, sino que también ha constituido todo un desafío para las ciencias, en el caso que queremos mencionar, concretamente para la ingeniería, cuando los expertos lograron en el año 1960 detener lo que era conocido como Le Mascaret, un logro que permitió detener las mareas y las olas en el Sena, por medio de ingeniosos inventos para el dragado.

No podemos dejar de lado que el Río Sena también ha constituido un grandiosa fuente de inspiración arquitectónica. Las joyas que han sido construidas con el pasar de los siglos en sus riberas le han conferido un carácter individual, y en ellas han tenido lugar verdaderos hitos de la historia.

Ejemplos de edificaciones emblemáticas del Sena son la Torre de Eiffel, icono parisino construido en 1889 para la exposición mundial, el Museo de Luvre, la Place de la Concorde, el Grand y el Petit Palais, el Arco del Triunfo, los bulevares de Haussmann, son unos pocos de los modelos de la abundancia de joyas arquitectónicas que custodia el Sena.

Amenazas

La convivencia con el Río Sena también ha constituido una amenaza para París. En el mes de enero del año 1910, los niveles de agua sufrieron un gran incremento, tan altos que se produjeron importantes inundaciones. Esta actividad del aumento del caudal del Sena ha sido constante y se constituyó en una seria amenaza nuevamente en los años 1924, 1955, 1982 y 1999 y 2000, en los que el río nuevamente llegó a niveles peligrosos, para dar paso luego a alertas de emergencia en la ciudad de París por posibles inundaciones.

Fue tal la amenaza, que en el año 2003 alrededor de cien mil obras de arte tuvieron que ser trasladadas fuera de París, hecho que constituyó el mayor traslado artístico desde la época de la segunda guerra mundial. Desde tiempos ancestrales, ha sido una costumbre custodiar una inmensa proporción del arte existente en París en bóvedas subterráneas, pero si el nivel del Río crece de forma alarmante, podrían sufrir inundaciones.

De acuerdo a estudios que datan del año 2002, de ocurrir un evento así, ello representaría una pérdida de alrededor de diez mil millones de euros, así como tener que suspender los servicios públicos, dejando sin electricidad, gas y teléfono a una gran parte de la población parisina.

Época Romana

El Río Sena ha sido testigo de hechos históricos desde tiempo inmemoriales. Debajo de la superficie de La Isla de la Cité, junto a la lamentablemente malograda de Catedral Notre Dame, es posible ver aún lo que queda del poblado galorromano que se situó allí hace milenios, para poder vivir en un entorno que es muy distinto al actual. Investigaciones arqueológicas han dado cuenta de que las canoas que fueron encontradas en esa localidad, cuya fecha de manufactura es de hace más de 6000 años, indican que ese primitivo asentamiento se adaptó muy bien a los márgenes del río y a ese estilo de vida.

El Río Sena también fue un excelente maestro para los romanos, quienes tuvieron que aprender a construir puentes sólidos que disminuyeran los riesgos de las corrientes de agua que transcurrían en los ríos de las regiones conquistadas, pero con el Sena aprendieron a sacar partido de los lugares en los que habían islas que dividían las corrientes de los ríos en dos o más partes, teniendo que construir puentes seccionales para dar mayor solidez a la superficie y obtener un tránsito fluvial fluido, sin obstáculos, convirtiéndolo el principal proveedor de los requerimientos básicos para el desarrollo y el sustento.

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Gracias al conocimiento aprendido y a la implementación de esta inmejorable estrategia, comenzaron a establecerse ciudades grandes y florecientes,  con excelente potencial en materia de comercio. La ciudad de París es el ejemplo de uno de esos supuestos, porque se trata de una isla que se encuentra en medio de la corriente del río, lo cual dio muchas facilidades para la construcción de obras de gran envergadura y optimizó el desarrollo comercial.

Perfila la silueta de la ciudad

Tanto hoy, como en épocas pretéritas, el Río Sena continúa vinculado a París y París está vinculada a su río. La corriente divide a esa hermosa capital, que fue el lugar de nacimiento de extraordinarios artistas y el lugar en el que desarrollaron su arte otros creadores afamados, en dos partes, en las que podremos encontrar sobre la tierra las más esplendorosas obras de arte y edificaciones, y sobre el caudal manso de sus aguas, encontraremos multitud de puentes, que en sí mismos también resultan ser extraordinarias obras en todos los estilos.

Por supuesto que ya no se observan canoas en el Sena, pero si es posible ver barcos de transporte de mercancía y hermosos yates de recreo que brindan a los turistas una impresionante opción de poder contemplar las riberas del río y todo lo que allí se ha construido desde el inicio de los tiempos, permitiendo que tengan una vista de primera mano de la riqueza cultural que se encuentra en ambos lados de la corriente.

Nacimiento y Ubicación

El Río Sena es una corriente del continente europeo hacia el lado atlántico, y se encuentra situado en el norte de Francia. Dónde nace el Río Sena es una localidad que se encuentra a unos 470 metros sobre el nivel del mar, en las adyacencias de Dijón, en la meseta de Langres, que se ubica en el departamento de Côte-d´Or, y en toda su extensión transita en dirección noroeste, atravesando ciudades como Troyes, Fontainebleau, París y Ruán (Rouen).

Posteriormente llega hasta una amplia desembocadura en un estuario que se encuentra situado entre las poblaciones de Havre y Honfleur, que se encuentran al noroeste, en lo que ha sido denominado como la Bahía del Sena, pero más concretamente, en el canal de la Mancha.

El Sena es el segundo río más largo de Francia, porque sólo le gana en extensión el Río Ródano, aunque parte de éste último transcurre en territorio de Suiza. Su extensión es de 776 kilómetros de longitud. Su recorrido es muy grande, abarcando unos 78650 kilómetros cuadrados, cuya mayor extensión se encuentra en la Bassin parissien o cuenca parisina, la que, si se analiza desde el punto de vista geológico, es una común cuenta de sedimento que asemeja tener la figura de una cubeta que se abre hacia el canal de la Mancha y el océano Atlántico.

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Esa cuenca contiene formaciones geológicas que transcurren por una prolongada pendiente que converge hacia el centro, encontrándose entre esas formaciones geológicas, unas muy importantes formaciones acuíferas. El relieve de la cuenta no es muy alto, porque apenas supera los 300 metros de altura sobre el  nivel del mar, a excepción del margen que se encuentra al  sureste, situado en un lugar denominado Morvan, donde la altura alcanza los 900 metros.

La extensión navegable del Sena para barcos de poco calado comienza en Bar-sur-Seine, a más de 563 kilómetros de el estuario en el que desemboca, y para otros barcos que tengan una mayor capacidad de peso y volumen, sólo es navegable  hasta Ruán, que se encuentra a unos 121 kilómetros de su desembocadura.

Recorrido y longitud del Río Sena

Si se observa la extensión de los 776 kilómetros de longitud, el Río Sena que puede ser fraccionado en cinco partes, las cuales son:

  • El Pequeño Sena o PetiteSeine, que transcurre desde su origen hasta la comuna Montereau-Fault-Yonne en la confluencia con el Río Yonne.
  • El Alto Sena o Haute Seine, que se inicia en Montereau-Fault-Yonne y llega hasta París.
  • El curso de la travesía de París, que recibe el nombre de Canal de París.
  • El Bajo Sena o BasseSeine, que transcurre desde París a Rouen.
  • El Sena Marítimo o Seinemaritime, que discurre desde la ciudad de Rouen hasta el Canal de la Mancha.

Por supuesto que existen lugares en los que se hace más amplio o más estrecho y formaciones o accidentes geográficos que lo modifican. A medida que transcurre por Châtillon el Sena se va ampliando, y cerca de la ciudad de Romilly se junta con el Río Aube. Luego, cuando llega hasta el valle de Montereau, el Río Yonne se le une y le brinda todo su caudal, y llegando a París se junta el Río Marne por su margen derecho. Además, a unos cuantos kilómetros después de pasar París, se le anexa el Río Oise por la derecha.

Características del curso

En su andadura hacia el mar, el Río Sena va ralentizando su curso y en la formación que se encuentra en la bahía de Le Havre, dirige su cauce hacia el mar del Norte. Allí, en el lugar en que se unen el río con el mar se forma un amplio estuario que hace muchos años sufría de una particularidad que recibió el nombre de macareo, que en realidad se trata de una extraña onda marítima que remonta la corriente en dirección contraria a un río.

Cabe resaltar que, en su largo recorrido, el caudal del Río Sena pasa por cuatro regiones relevantes y 14 departamentos, que son: en la región de Borgoña-Franco Condado, el departamento de Cöte-b´Or; en la región de Gran Éste, los departamentos de Aube y Marne; en la región deÏle-de-France, los departamentos de Seine-et-arne, Essonne, Val-de-Marne, París, Hauts-de-Seine, Seine-Saint-Denis, Val-d´Oise e Yvelines;  y en la región de Normandía, los departamentos de Eure, Sena Marítimo y Calvados, que está situado en el tramo final de su desembocadura.

Ciudades por las que pasa

En el transcurso de su paso, cruza por poblaciones de importancia como Troyes, Melún, Ruán  y particularmente la capital, París, a la cual atraviesa por sus dos riveras. Recorre desde Source-Seine, que en la antigüedad era Saint-Germain-Source-Seine, hasta a Honfleur, pasa por 164 ciudades  que son tributarias del Sena, entre las que se halla París y una de las cuales es L’Île-Saint-Denis, situada en la isla del mismo nombre.

No se puede decir que el Río Sena  sea un río tranquilo, debido a que exhibe variedad en su extensión. Se pueden observar oleajes y mareas en varios de sus puntos, lo que se ha podido controlar con la utilización de nuevas tecnologías y diferentes herramientas que  han sido creadas por el hombre en el transcurso del tiempo, todo ello con el objetivo de impedir la ocurrencia de eventualidades de mucho riesgo para las ciudades y sus habitantes.

Profundidad

Hasta la última década de los años 1800 el Río Siena tenía menos profundidad, debido a lo cual se impedía el paso de barcos de gran tamaño, pero alrededor del año 1910, momento en el que ocurrió una enorme inundación, debido a que se presentaron las lluvias más torrenciales hasta el momento, lo que dio origen a un muy importante aumento del nivel del caudal de sus aguas, se pudieron hacer estudios y prospecciones que permitieron implementar estrategias con las que se pudo aumentar el calado de los barcos que podían navegar por sus aguas sin mayores riesgos.

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El cauce de las aguas de este enorme río francés es regular por lo general, pero debido a los incidentes que pueden presentarse en ciertos períodos, por las condiciones de los Tipos de Clima, se han estado tomando medidas para prevenir el efecto que producen las eventuales modificaciones en sus aguas. A la altura de la capital, el río se encuentra sólo a 24 metros sobre el nivel del mar y dista unos 445 kilómetros hacia su desembocadura, condiciones que le permiten desplazarse en forma tranquila y otorga una gran facilidad para poder navegar en su corriente.

Conglomerado Comercial

A día de hoy, el Río Sena ha resultado ser una inmejorable vía para el transporte de mercancías y elementos de intercambio comercial, y sin lugar a dudas, se trata de un aliado inestimable que funge como reclamo espectacular para las travesías turísticas, así como de personas en general, quienes deseen trasladarse de un lugar a otro por vía acuática, se les resultaría más corto el viaje. En este sentido son muy comunes y versátiles los conocidos bateaux mouches, que quiere decir barcos mosca, que se utilizan para este tipo de traslados.

En todo caso, existe un proyecto que pretende potenciar la utilización del Sena como vía de transporte fluvial masivo de personas de forma cotidiana, el objetivo del proyecto es hacer que disminuya la contaminación existente y brindar a los usuarios una opción frente a los vehículos que ocasionan demasiado tráfico y a la utilización del metro, el cual se encuentra ya muy sobrepasado en las horas de mayor afluencia.

La Canalización y el Sistema de Esclusas

Los barcos comerciales pueden navegar por el Río Sena desde la ciudad de Bar-sur-Seine, una comuna situada al este, a 560 kilómetros de su desembocadura. Y los barcos transatlánticos pueden arribar hasta Ruán, a unos 120 kilómetros de Mares y Océanos. La zona del Río donde es posible que se agiten las mareas, situada desde Le Havre hasta pasar Ruán, es seguida de una sección en la que sus aguas son canalizadas por un sistema de cuatro enormes esclusas múltiples, todo hasta que se llega a la desembocadura del Oise en la comuna de Conflans-Sainte-Honorine, hacia el noroeste.

También se han construido dos sistemas de esclusas múltiples, situadas en los alrededores de Bougival y en Suresnes, en los alrededores de París, con las que se eleva a los barcos al mismo nivel del río, a la altura de la capital francesa, desde donde se llega a la desembocadura del Río Marne. A partir de allí, se encuentran otros sistemas de esclusas que se aseguran de que no existan problemas en la navegación hasta Saint Mammä, donde desemboca el Loing.

Luego de pasar el Loing, se utiliza una octava esclusa para poder alcanzar el nivel del Río Yonne, en la comuna de Montereau, y desde esa desembocadura otros barcos aún más grandes pueden continuar su travesía por el río hasta llegar a Nogent-sur-Seine. A partir de este punto, el río es navegable solo para embarcaciones pequeñas. Y posteriormente, ya no existe manera de navegar el río, en los alrededores de la comuna de Marcilly-sur-Seine, lugar en el que el antiguo canal del Alto Sena si permitía la navegación de barcos hasta la ciudad de Troyes.

El Río Sena no solo transita por las ciudades francesas de Borgoña, Champaña-Ardenas, Isla de Francia, Alta Normandía, Baja Normandía, sino que también lo hace por la ciudad de Bruselas, que es la capital del Bélgica.

Afluentes del Río Sena

El Río Sena tiene afluentes que aumentan y refuerzan el caudal de sus aguas en muchos puntos de su extensión. Entre ellos, encontramos que hacia el norte se unen a él, el Río Aube, el Río Marne y el Río Oise y, desde el lado ubicado en la parte sur, se une con el Río Yonne y el Río Eure. Otra de las actividades en las que participa el Sena es en el intercambio de aguas por medio de canales con el Escalde, el Río Mosa, el Río Rin, el Río Saôna y el Río Loira, lo que completa la lista de afluentes de las aguas que toma para que su caudal llegue hasta el océano Atlántico.

Desembocadura del Río Sena

Como hemos indicado anteriormente, el Río Sena desemboca en un gran estuario, lleno de hermosos paisajes y características usuales en todo paisaje acuático. Este se encuentra situado en los alrededores de las comunidades de Havre y Honfleur, en la Bahía del Sena, hacia el canal de la Mancha. Por supuesto, la zona del Canal de la Mancha es una de las que tiene gran diversidad y belleza de paisajes, con marismas, acantilados, dunas y extensas playas de arena lavada por las mareas. También es el hábitat natural de muchas especies animales, principalmente de aves acuáticas.

Río Sena y París

Además de las hermosas e históricas edificaciones, construcciones y monumentos que se encuentran en los alrededores del Sena en París, las dos orillas están declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1991. Pero esta designación sólo está referida a las orillas del Río propiamente dicho y a los monumentos que se construyeron en esos parajes.

En la ribera derecha o rive droite, podemos encontrar el edificio del Ayuntamiento, que también recibe el nombre de Hotel de Ville. Allí se ubican igualmente el Musée Picasso, el Musée Carnavalet y el Musée National d’Art Modern, entre otros. Y en la muy conocida Maison, tal es su nombre, vivió el famoso escritor Víctor Hugo.

En la ribera derecha también están situados el Jardín de las Tullerías, el Jeu de Paume, la Orangerie, el Arco de Triunfo, la Place de l’alma, que está ubicada encima del túnel en que falleció Diana de Gales. Estos son sitios de un indudable atractivo turístico en esa margen

En la rive gauche u orilla izquierda, también podremos ver lugares muy llamativos e interesantes. En esa orilla está uno de los monumentos más importantes de París, conocido en todo el mundo, y signo de distinción francés, la Torre Eiffel, seguida de Les Invalides, lugar en el que fueron sepultados los restos de Napoleón y también hogar del Museo del Ejército, y varios otros museos como el Musée Rodin y el Musée d’Orsay, detrás del cual se despliega el Barrio Latino, con dos inmensas y hermosas zonas verdes que no hay que dejar de visitar: el Jardín de Luxemburgo y el Jardín des Plantes.

Curiosidades del Río Sena

Los más relevantes y afamados pintores del siglo XIX y XX como Vuillard, Richard Parkes Bonington, Albert Marquet, Eugène Isabey, Camille Corot entre otros, recibieron su inspiración del Río Sena para crear varias de sus grandes obras maestras.

También intérpretes del tango como Astor Piazzolla, dedicaron una canción al propio Río Sena, de hecho, una leyenda urbana indica que el gran Carlos Gardel nació en París. Grandiosos escritores como Víctor Hugo, le dedicaron sus letras, como ocurre en la novela de Los Miserables, en la que se explica la forma en que uno de los protagonistas pudo escapar por las alcantarillas del este amplio río.

Hay muchas leyendas asociadas e inspiradas en el Sena, como lo atestigua el trabajo de grandes artistas del siglo XX como Rainer Maria Rilke y Vladímir Nabokov, y no podemos olvidar la leyenda de la máscara mortuoria de una joven encontrada en sus orillas.

Río Sena contaminado

El Río Sena, tal y como ocurre con el resto de los ríos de Europa, y casi todos en el mundo entero, ha sido dañado y afectado por la contaminación industrial. Con la agravante, en el caso del Sena, de que también es receptor de las aguas residuales domésticas de gran parte de París, lo que ocasionó enormes daños. Es de tal proporción la contaminación, que se ha llegado a decir que París huele mal, y es precisamente producto de las aguas del Sena.

En la década de 1920 las autoridades que tenían como función encargarse de la atención del Río Sena, estuvieron en la búsqueda de paliativos para los inconvenientes sanitarios y de ambiente que se le estaban ocasionando, pero nada se logró, hasta que en el año 1960 los franceses comenzaron a invertir en la creación de instalaciones para el saneamiento de aguas servidas adecuadas para mejorar el panorama del río. Este procedimiento de limpieza no ha marchado todo lo veloz que se quiere, pero se han obtenido resultados considerables afortunadamente, y hoy ya se pueden encontrar alrededor de 30 especies de peces.

Los trabajos comenzaron con la operación de once estaciones de bombeo y tratamiento, hasta que en el año 2008 se había alcanzado la cifra de dos mil. Desde el punto de vista legal, se crearon varias normativas que regularon el tema de las aguas del Sena y su contaminación. Se han impuesto multas a las empresas que han sido atrapadas arrojando sustancias contaminantes al agua y se creó un subsidio de entre 100 y 150 euros por hectárea, para los agricultores que llevan a cabo sus actividades en las zonas cercanas al Río, con el objetivo de que no lo contaminen.

Río Sena Bruselas

La ciudad de Bruselas se fundó aproximadamente en el 979, en el valle del Río Sena, pero tiene una interesante historia de su fundación, en la que pareciera que esta preciosa ciudad de Europa no tiene ningún río cercano a sus adyacencias ¿Por qué? Es interesante intentar conocerlo.

A mediados del siglo 19, el centro de la ciudad de Bruselas se encontraba dividido en dos áreas muy diferenciadas. La primera era lo que llamaban la zona alta, en la que se encuentra el Palacio Real o el Mont des Arts, y era el lugar en el que había establecido su residencia la nobleza y la burguesía.

La segunda, era denominada la zona baja de la ciudad, que se encontraba dividida por el Río Sena o Senne, que a su vez se bifurca en dos secciones antes de ingresar por la zona de Anderlecht, creándose dos islas en medio de la ciudad. La más ancha de ellas era la que recibía el nombre de isla de Saint Géry, en los alrededores de la cual, el Río Senne se había transformado en una corriente de agua contaminada e insalubre, debido a la gran densidad de población que allí convive, unido al hecho de que también era un área industrial.

Las condiciones

De forma paralela, en el mismo período, varias estaciones de sequía y constantes inundaciones, unido a una muy grave epidemia de cólera, que se atribuyó a las míseras condiciones en las que vivía esa población y al río mismo,  hizo que las autoridades comenzaran a buscar soluciones y formas de acabar con el problema que dañaba a tanta cantidad de gente y que se extendía hacia las zonas aledañas.

Se hicieron varios estudios, planificaciones y proyectos muy grandes, entre los cuales tuvo preferencia el que pretendió evitar que el río atravesara la ciudad. Esta idea se le había ocurrido al arquitecto Léon Suys, y fue dada a conocer en el año 1865, con la ayuda del alcalde Jules Anspach.

Lo cierto es que se logró canalizar el agua con ese plan, construyéndose varios bulevares que tenían la forma de una “Y” y que a día de hoy cruzan el centro Bruselas, entrelazando las estaciones del norte (Nord) y del sur (Midi). A partir de allí, se inició una era de cambios en el centro de la ciudad, uno de los efectos de lo cual fue que los habitantes dejaron de tener el río a su vista.

De esta forma, en esa área el Río Sena se encuentra abovedado por completo, y sólo se aprecia por el alcantarillado, hasta llegar al puerto de Anderlecht y Saint-Gery, entre el Convento de Clarisas y el León de Oro.

Puentes del Río Sena

Hoy hay, en total, treinta y siete puentes que cruzan el Río Sena, solo en la ciudad de París, y otros cuantos en las afueras de la ciudad. De entre los que se encuentran en París, vale la pena visitar por su historia y su vistosidad los puentes de Louis-Philippe y de Neuf, éste último data del año 1607.

Resulta muy llamativo también el llamado puente de la Tournelle, con el que se unen los distritos IV y V de la ciudad. Pero se sabe por los historiadores y por las historias de las familias antiguas del lugar, que este no es el primer puente que fue construido en ese lugar, por el contrario, se han efectuado varias construcciones de comunicación territorial y de tránsito en esa área.

En la antigüedad se encontraba allí un puente de madera, que fue parcialmente destruido en una inundación durante el año de 1651. Luego fue objeto de restauración en el año 1956, utilizándose como material principal la piedra, lamentablemente en el año 1918 se destruyó de nuevo, debido a lo cual se construyó el que se encuentra actualmente en ese lugar.

¿De donde viene el nombre?

Se dice que su nombre debe ser atribuido a una pequeña torre que se encontraba en sus cercanías y que pertenecía a un muro que Felipe Augusto había mandado a construir; y que luego fue sustituida por un castillo pequeño. La estructura de este puente está compuesta por un gran arco central y dos arcos laterales, teniendo como adorno un pilar de 15 metros de alto. Completa el conjunto una hermosa estatua de Santa Genoveva, quien es la patrona de París, creada por el escultor Paul Landowski.

Si usted sale de París, también podrá encontrar puentes muy hermosos y llamativos, entre los que debe mencionarse en particular el Puente de Normandía, uno de los más largos puentes atirantados del mundo, que une Le Havre con Honfleur.

El innovador barco eléctrico que navega el Sena

Al Sena le corresponde el honor de haber sido el primer río navegado por un barco totalmente eléctrico. Tiene el nombre de Seabubble, funciona únicamente con energía eléctrica y es alimentado por dos motores, con tecnología de hidrodeslizadores, lo que da como resultado la reducción del efecto de arrastre de la nave sobre el agua, lo que hace que su navegación sea más cómoda, y al ser un barco eléctrico, no hay posibilidad de residuos que contaminen el Río.

Flora y fauna del Río Sena

Actualmente, el Sena es el río más utilizado en Francia, pero tiene una gran variedad de flora y existen varios animales que han hecho de él su hábitat. Aunque el efecto nocivo de la pesca y la comercialización se ha podido observar en el Sena, aún se puede encontrar gran variedad de peces como la lota, a lo largo de su caudal, también se pueden encontrar lucios europeos, que son animales de gran resistencia, y en otra parte del cauce alto se encuentran percas, locha espinosa, y también especies como el lobo de río y otras más

Esperamos que haya disfrutado esta lectura sobre el Río Sena, sin duda de los más importantes Ríos del continente europeo, y le animamos a seguir investigando sobre este y otras fascinantes vías acuáticas.


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