Se acerca el día de Todos los Santos, el cual se celebra en España el 1 de noviembre. Tradicionalmente se dedica este día a recordar a nuestros seres queridos que ya no se encuentran entre nosotros. Lo más habitual es llevar flores al cementerio y colocarlas en la tumba de nuestros amigos o familiares. No obstante, la elección puede resultar a veces un poco complicada. Por ello vamos a explicar en este artículo cuáles son las flores del cementerio más populares.
Aunque lo más probable es que pensemos muy a menudo en nuestros difuntos seres queridos, el día de Todos los Santos es la oportunidad perfecta para visitarlos y decorar sus tumbas con diversas flores, que se pueden dejar sueltas, en ramos, en coronas o en centros. Es una manera preciosa de mostrar afecto hacia la persona fallecida. Son muchas las plantas que podemos utilizar para esta tarea, pero comentaremos más en detalle las flores del cementerio más comunes y sus significados.
¿Cuáles son las flores de los cementerios?
Si bien es cierto que no hay nada como las flores naturales, una buena alternativa son las artificiales. Generalmente están hechas de material resistente y fuerte. Si la calidad es buena, incluso puede resultar sumamente difícil distinguirlas de las plantas reales. Además, podemos escoger las flores que más nos gusten durante cualquier época del año, facilitando de esta manera decorar las tumbas de nuestros seres queridos con plantas fuera de temporada, como las orquídeas o las rosas blancas, por ejemplo.
Hay un amplio abanico de variedades de plantas y flores del cementerio que podemos combinar como queramos. Sin embargo, no es tan fácil elegirlas, ya sean naturales o artificiales. Para ayudaros un poco con esta tarea, vamos a comentar un total de cinco ejemplos de flores ideales para conmemorar a aquellas personas que ya no están entre nosotros.
Crisantemos
En primer lugar tenemos a los crisantemos. Sin lugar a dudas, son las flores estrella del día de Todos los Santos, pues son las más vendidas en esta época, al menos en España. Uno de los motivos principales que hace tan populares a estas flores del cementerio son su larga durabilidad y resistencia. Incluso siendo plantas cortadas, sus cuidados para sobrevivir son mínimos, convirtiéndolas en elementos decorativos ideales para las lápidas y tumbas.
Hay que destacar que podemos encontrar crisantemos de diferentes colores, cada uno con su propio significado. Por lo general, estas flores representan la longevidad y la eternidad en cuanto al duelo. Aún y así, los colores más populares para el día de Todos los Santos son el blanco y el naranja. El primero representa el amor leal y la honestidad, mientras que el segundo se relaciona con el amor delicado.
Lirios blancos
También los lirios blancos son muy apreciados para homenajear a los difuntos. Concretamente, los lirios cala son los más populares para llevar al cementerio, ya que simbolizan el reconocimiento y la simpatía hacia las personas que ya no se encuentran entre nosotros. No obstante, resulta una tarea bastante difícil encontrar estas flores al corte. Por este motivo es más habitual, e igualmente válido, utilizar lirios orientales, las azucenas o los star-gazers para celebrar el 1 de noviembre.
Sea cual sea la variedad, todos ellos desprenden un particular aroma que se lleva asociando con la tranquilidad del alma del difunto desde hace muchos siglos. De hecho, los cristianos creen que habían lirios en la tumba de la Virgen María. Por este motivo no es de extrañar que sean unas de las protagonistas en el día de Todos los Santos.
Claveles
Otras de las flores del cementerio más populares son los claveles. Al igual que los crisantemos, estas flores también se conservan muy bien y suelen durar más que otros vegetales. Además, desprenden un aroma muy intenso y característico, igual que hacen los lirios. El significado de los claveles dependerá de su color:
- Claveles rojos: Simbolizan admiración y respeto hacia la persona fallecida. En el caso de ser una pareja, simbolizan el amor que sentían.
- Claveles blancos: Representan la pureza del alma.
- Claveles rosas: Se relacionan con el recuerdo.
- Claveles amarillos: Ofrecen armonía y luz frente a la pérdida de los seres queridos.
Rosas
Sin lugar a dudas, las rosas se pueden considerar como las reinas de las flores. Aunque solemos asociarlas más bien a momentos románticos, estas flores también son muy populares en los arreglos funerarios. Concretamente, las rosas blancas son de las más habituales para llevar al cementerio, pues representan la pureza del alma, el agradecimiento y la admiración, todo en relación con la persona fallecida, claro. Además, simbolizan un nuevo comienzo tanto para amigos como para familiares.
Las rosas rojas, por otro lado, no se quedan cortas en protagonismo el día uno de noviembre. Como seguramente ya sabréis, son el símbolo más extendido para representar el amor eterno, algo que podemos transmitir también hacia nuestros seres queridos fallecidos. Cabe decir que si combinamos las rosas rojas con las rosas blancas para homenajear a los difuntos, estas adquieren und matiz de aprecio, lealtad y amistad eternos hacia la persona fallecida.
Gladiolos
Por último quedan por destacar los gladiolos. Se trata de unas flores muy elegantes que se utilizan muy frecuentemente para decorar tumbas y lápidas. Son el reflejo de la ausencia de un ser amado y también de la tristeza por esa pérdida. No obstante, en otros contextos simbolizan el amor alocado, el erotismo, la fuerza, la victoria o la integridad. Generalmente se asocia a los gladiolos a la ascensión del alma de la persona fallecida al cielo, pues crecen verticalmente en forma de espiga, muy similar a una lanza o a una espada que señala hacia arriba y guía a los difuntos hacia la vida eterna, según las creencias cristianas.
Ahora ya conocéis las cinco flores del cementerio más populares. ¿Con cuál decidís honrar a vuestros difuntos en el día de Todos los Santos? Incluso una combinación de varios tipos resultaría ideal. Al fin y al cabo, se trata de conmemorar a nuestros seres queridos, y eso haremos escojamos las plantas que sean.