El origen de la tristeza, del autor Pablo ramos, es una de esas novelas que aunque son cortas, nos deleitan poco a poco. Si deseas conocer más sobre la obra, estás en el lugar indicado
El origen de la tristeza
Es una novela corta, de apenas 168 páginas que fácilmente puedes leerte en una tarde libre, pero este libro en particular es de aquellos que te exige leerlos por partes, en tres, específicamente. Ya que son tres los relatos que contiene, que están relacionados entre sí, los mismos personajes y paisajes, pero que si los lees de forma independiente no afectaría en lo absoluto.
Gabriel, un muchacho que anduvo a caballo en su infancia hasta la madurez, el punto de la vida donde estamos literalmente en el medio, donde cuestionamos (y los demás cuestionan) todo, y entendemos el mundo menos que en cualquier otro momento.
En esa etapa donde no hay más que incertidumbre, en qué fantasear con el amor y el sexo nos consume el tiempo. Gabriel vive en un barrio llamado “El viaducto”, en los años 80. Es ese tipo de infancia que aunque sucedió en el otro lado del planeta, es más parecida a las nuestras que a las de los niños de hoy. Es ese tipo de infancias donde pasaríamos el día en la calle, con la bicicleta, desapareciendo de casa por horas, y haciendo mil cosas junto a nuestros amigos.
Este es el ambiente donde Gabriel se desenvuelve, solo que en un barrio mucho más pobre que donde crecimos la mayoría de nosotros:
Al año de haber nacido Julia nuestra pieza tuvo que ser dividida en dos para hacer la suya. Papá simplificó la construcción al máximo y levantó una sola pared dejando media ventana para cada lado. Y si dormir en una pieza con media ventana que da a una cocina es algo que suena raro, peor era que la de papá y mamá ni siquiera tuviera ventana, y su única abertura fuera una puerta doble que daba directo a la nuestra.
Así que, para poder entrar en su habitación, ellos tenían que pasar por la nuestra. También para ir a la de Julia. Para ir a nuestra pieza al baño había que pasar por el comedor, y para ir desde la de papá y mamá, había que ir primero a nuestra pieza y luego al comedor. Un comedor que en la época de los abuelos había sido una galería, y que tenía por techo un toldo de aluminio donde la lluvia, por más finita que fuera, sonaba como la tormenta del fin del mundo.
Si se nota algo extraño (o diferente) en el lenguaje del texto, es que es evidentemente castellano pero con un marcado carácter argentino. Este en lo particular es uno de los puntos en contra del libro, porque es complicado comenzar, ya que es un dialecto bastante particular. En el segundo y tercer relato no se presentan imprevistos, es cuestión de acostumbrarse con el primero.
La historia, como se resalta en la cita, está narrada en primera persona por el mismo Gabriel, lo que hace que la sintamos aún más cercana. No tiene ningún tipo de pudor para expresar sus sentimientos, lo que ve, lo que le gusta y lo que no. Esa inocencia queda al descubierto y nos permite abrirnos u cuestionar cosas que con los años solo hacemos en privado o internamente.
Opiniones sobre la novela
Otro punto que puede considerarse negativo en la historia, pero que sin embargo tiene sentido totalmente, es que es una narración abierta. No solo tiene un final abierto, sino toda la narración. Podrían ser fácilmente tres capítulos al azar de una novela.
En todo momento transmite esa sensación de que no cierra, de que no conoces todo el entorno ni todas las circunstancias de la vida de Gabriel; sino todo lo contrario, quedas con ganas de más. Pero es parte de la magia del libro, que es como ver la vida de alguien por el agujero de una pared, pero de la pared de sus sentimientos.
Pablo Ramos, el autor; plasmó en El origen de la tristeza, aquellos momentos de nuestras vidas que son más complicados de escribir, cuando todo nos molestas, cuando te sientes que sabes más que los demás y cuando los adultos son un enemigo que necesitas combatir.
Es muy difícil plasmar cómo nos sentimos al abandonar nuestra inocencia y el cobijo de nuestra familia, cuando deseamos comernos el mundo, cuando la pasión y la impulsividad nos mueven. Y Pablo Ramos supo hacerlo a la perfección, hay muchísimas frases y guiños que transmiten ese Origen de la tristeza, sientes el sentimiento de rabia, desapego y rebeldía.
El origen de la tristeza es una historia tierna y melancólica, donde las cosas que más importan no son las más relevantes, sino las que hacen que tu corazón de un vuelco. Una breve y pequeña historia para deleitarse y disfrutarla de a poco, con un café, sentado en el sofá en un día fresco. Una historia donde los detalles pequeños son los que más se disfrutan y se sufren.
Hasta aquí, nuestro artículo sobre este maravilloso libro corto. Si este artículo te ha gustado, visita nuestro artículo relacionado resumen el laberinto de la soledad