Cada vez son más las personas que se suman a la teoría de los dinosaurios con plumas. Diversos científicos y expertos la respaldan y han ido buscando explicaciones a la aparición de esta característica. Aunque para algunos todavía puede ser una imagen un poco rara, los dinosaurios con pluma sí existían.
En este artículo vamos a hablar un poco sobre el motivo de la aparición de las plumas en los dinosaurios y lo que tienen en común con las aves modernas. Además, comentaremos algunos de los dinosaurios con plumas más populares. Si te interesa el tema, te recomiendo que sigas leyendo.
¿Por qué se dice que los dinosaurios tenían plumas?
Seguramente que más de uno se preguntará por qué ahora todo el mundo dice que los dinosaurios tenían plumas. Este hecho sorprende mucho, sobre todo para aquellos que están acostumbrados a ver películas como Parque Jurásico (aunque en las más recientes de la saga, las películas de «Jurassic World», sí que podemos apreciar algunas especies que poseen esta característica). Resulta curioso que choque tanto la idea de dinosaurios con plumas, cuando el primero con esta característica fue descubierto a mediados del siglo XIX. Se trata del Archaeopteryx, del cual hablaremos más adelante.
En muchas ocasionas asociamos las plumas con volar. Quizá por esto resulta algo confuso imaginarnos a unos animales tan grandes, incapaces de volar, cubiertos de plumas. ¿Pero por qué no? Las avestruces y los pingüinos, por ejemplo, tampoco pueden volar y aún así cuentan con esta característica de las aves. Además, hay que destacar que existían dinosaurios que sí eran capaces de volar, como por ejemplo el Microraptor o el Archaeopteryx que hemos mencionado anteriormente. También hay que recordar que las aves modernas que comparten con nosotros el planeta son, en realidad, dinosaurios.
Los dinosaurios con plumas y las aves modernas
Sí, había muchos dinosaurios con plumas incapaces de volar, pero la aparición de esta característica se debe a la evolución. Dependiendo del ambiente en el que vivan los seres vividos, algunas características pueden ser más o menos aptas. En función de ello, las especies cambian o crean órganos nuevos. Se trata de la base de la evolución que se desarrolla a través de la selección natural.
Llegados a este punto es importante destacar que las aves de hoy en día pueden volar gracias a que sus ancestros, los dinosaurios, desarrollaran plumas, pero éstos no lo hicieron para que las aves pudieran volar en la actualidad. La evolución no sigue una estrategia, si no que surge aleatoriamente según conveniencia y siguiendo las leyes de la selección natural. Por lo tanto, la aparición de las plumas tuvo lugar mucho antes del vuelo de las aves. Se especula que tenían inicialmente una función termorreguladora. Es decir: Ayudaban a los animales a mantener su temperatura corporal. A partir de ahí, los científicos creen que su función pudo evolucionar hasta adquirir más utilidades, como por ejemplo la atracción sexual, el camuflaje y también el vuelo.
Ejemplos de dinosaurios con plumas
Ahora que ya entendemos un poco mejor el funcionamiento de las plumas, hablaremos sobre algunos de los dinosaurios con plumas más famosos, y seguro que caerá más de un mito acerca de ellos.
Archaeopteryx
Como ya hemos mencionado anteriormente, el Archaeopteryx fue el primer dinosaurio con plumas en ser descubierto. A raíz de este hallazgo, empezaron a surgir todo tipo de teorías acerca de la apariencia física de estos animales extintos. Esta ave prehistórica vivió hace unos 150 millones de años, durante el Jurásico superior, en el sur de Alemania. Tenía un tamaño similar al de un cuervo, aunque de aspecto se parecía más a los deinonicosaurios, pues poseían unos dientes afilados, una cola larga, tres dedos con garras y garras asesinas que serían dedos segundos hiperextensibles, entre otras características.
Precisamente por estos rasgos, el Archaeopteryx es la especie clave en la transición entre los dinosaurios y las aves. Por ello, este dinosaurio con plumas es de suma importancia para el estudio tanto de dinosaurios como del origen de las aves. Se han encontrado un total de once fósiles de esta especie, y la mayoría de ellos poseen impresiones de plumas. Ahí se puede apreciar que tenían una forma bastante avanzada, de lo que se puede deducir que el origen de las plumas es anterior al Jurásico superior.
Hay que destacar que el primer Archaeopteryx fue hallado aproximadamente dos años tras la publicación de «El origen de las especies», el libro de Charles Darwin que explica la teoría de la evolución. Este dinosaurio con plumas confirmó la misma y se convirtió es una pieza clave para el estudio de las transiciones y el origen de las aves.
Velociraptor
No cabe duda que uno de los dinosaurios más famosos a día de hoy es el Velociraptor, todo gracias a la saga de Parque Jurásico. No obstante, las películas no han sido muy fieles a la hora de retratar a este animal extinto. De hecho, se han basado en los rasgos físicos del Deinonychus, del cual hablaremos también. Sin embargo, el nombre «Velociraptor» resulta mucho más dramático y fácil de recordar.
Pero entonces, ¿cómo era el Velociraptor en realidad? Para empezar, era mucho más pequeño que en las películas, con una altura de alrededor de 70 centímetros. Además, puesto que se encuentra en esta lista, estaba cubierto de plumas. El Velociraptor fue un carnívoro bípedo que vivía en el Cretácica superior, hace entre 80 y 70 millones de años, en el continente asiático. Su nombre proviene del latín y significa «ladrón veloz». Lo que sí es cierto es que parece haber cazado en manda y que, para ello, empleaba diversas estrategias, lo que indica que poseía una inteligencia destacable.
Deinonychus
Sigamos ahora con el Deinonychus, el depredador que sí aparece en las películas de Parque Jurásico, pero con el nombre del Velociraptor. Se trata de un dinosaurio terópodo que vivió hace aproximadamente 110 millones de años durante el Cretácico inferior en la actual Norteamérica. Su nombre proviene del griego y significa «garras terribles». Este carnívoro era considerablemente más fuerte y grande que el Velociraptor, su pariente asiático. Al igual que éste, el Deinonychus contaba con una capa de plumas para mantener su temperatura corporal.
Entre las características más destacables de este dinosaurio se encuentran sus garras retráctiles de los pies, que medía unos doce centímetros y tenía forma de hoz; sus tres dedos con garras grandes y afiladas; su visión binocular para calcular mejor la distancia que había entre el individuo en cuestión y su presa; y sus patas alargadas con las que podía correr a una velocidad de 50 kilómetros por hora. También hay que destacar su inteligencia, aparentemente mayor que la de otros dinosaurios de la época. El Deinonychus, al igual que su pariente asiático, solía cazar en jauría y, entre todos y mediante la aplicación de ciertas estrategias, podían tumbar a herbívoros mucho más grandes que ellos.
Therizinosaurus
Otro de los dinosaurios con plumas más famosos es el Therizinosaurus, un animal muy peculiar que tiene fama precisamente por ello. Su nombre proviene del griego y significa «lagarto con guadaña». Se trata de un dinosaurio terópodo que vivió durante el Cretácico superior, hace alrededor de 70 millones de años, en el actual continente asiático.
Realmente tenemos poca información acerca del Therizinosaurus, pero estudios realizados sobre parientes cercanos dan algunos indicios sobre cómo pudo haber vivido este enorme animal con garras gigantescas. Cabe decir que fue uno de los terópodos más grandes, por no decir el que más, pues podía alcanzar una longitud de hasta 12 metros y una altura de hasta 5,3 metros.
En cuanto a los hábitos alimenticios de esta peculiar dinosaurio, éstos son un misterio. Los científicos no han podido esclarecer esta gran incógnita, ya que no existe material craneal para hacer un estudio acerca de su dieta. Se especula que fue herbívoro y que utilizaba sus gigantescas garras para alcanzar ramas y arrancar plantas y otro material vegetal. Además, los expertos no descartan que pudo haberlas usado también para cazar pequeños mamíferos y lagartos.
Cabe decir que resulta sumamente difícil encontrar herbívoros entre los dinosaurios terópodos. Por lo tanto no es de extrañar que existan otras teorías relacionado con la función de las enormes garras el Therizinosaurus. Entre ellas se encuentra la defensa frente a otros depredadores y también la lucha intraespecífica, es decir, contra individuos de su misma especie, ya sea para aparearse o para proteger su territorio.
Yutyrannus
Por último nos queda por destacar el Yutyrannus. De hecho, se trata del más grande de todos los que poseen esta característica, llegando a alcanzar una longitud de hasta 9 metros y un peso de aproximadamente 1414 kilos. Su nombre significa «tirano con plumas» y vivió durante el período del Cretácico en la actual Asia, hace alrededor de 125 millones de años. El Yutyrannus era un depredador bípedo que posiblemente cazaba en grupo. Esta teoría se debe al hecho de que tres individuos de esta especie fueron encontrados juntos.
Éstos son algunos ejemplos de dinosaurios con plumas, pero existen más. A medida que avanza la ciencia y la tecnología, cada vez somos más capaces de reconstruir e imaginarnos cómo pudo haber sido la vida antes de nuestra existencia. Resulta muy curioso cómo de unos animales de aspecto algo monstruoso han podido surgir las aves que conocemos hoy en día, ¿verdad?