Los delfines son animales muy inteligentes, conocidos por su gran carisma y simpatía, y por ser una especie muy unida entre ellos. En este artículo hablaremos de un punto muy importante para la vida que es la gestación, en este caso específicamente de los delfines y te diremos cómo nacen los delfines. Te invitamos a seguir leyendo.
¿Quiénes son los delfines?
Antes que nada, definiremos mejor a los delfines. Son cetáceos que miden entre 2 – 9 metros de largo, pueden ser nombrados mamíferos debido a que ellos necesitan cada 10 minutos nadar hacia la superficie para poder obtener aire, su hocico resalta por lo largo que es.
Siempre viajan en grupo donde se protegen y ayudan entre todos. Entre los grupos de los delfines, cada uno adapta un rol dependiendo de sus características como lo son su género, agilidad, nivel de reproducción, entre otras cualidades. Son muy sociables, su grupo puede estar constituido por más de 1000 individuos. Posee un círculo profundo en la parte superior de su cuerpo, lo cual se llama espiráculo el cual cumple la función de ayudarlos a respirar.
Sus depredadores suelen ser los tiburones o las orcas, aunque ahora su más grande depredador es el ser humano debido a la influencia que este ha tenido en la contaminación y cambios climáticos influyendo en gran escala su hábitat natural.
Ya que aclaramos mejor quiénes son los delfines, ahora sí tocaremos el punto principal: su reproducción. Al ser un animal inteligente muchos han mostrado gran interés y curiosidad por saber el proceso reproductivo de este cetáceo, el cual se parece en gran medida al proceso reproductivo de los seres humanos. Se ha deseado obtener más información sobre este tema cuando los delfines están en su entorno natural pero ha sido difícil debido a la timidez de estos, gran parte de la información ha sido obtenida estudiando a delfines en cautiverios.
Proceso de Reproducción
Los delfines alcanzan su madurez sexual a los 5 – 7 años de edad, la cual puede variar ya que ha habido casos de delfines que han despertado sexualmente poco después, pero más son los casos de despertar su sexualidad un poco antes, debido a que son uno de los animales más sexuales que existen, entre los 11 – 13 años de edad.
Sexualmente los machos son más activos que las hembras, despertando su interés antes que ellas, los machos se pueden aparear con varias hembras en un solo día, y suelen tener sexo simplemente por placer y satisfacción.
El proceso del cortejo empieza por parte del macho hacia la hembra, manifiesta sus señales de apareamiento mediante grandes saltos y acrobacias, también intenta acercarse de a poco a la hembra y al lograrlo la acaricia con su hocico o le rosa su cuerpo mientras nadan en grupo; al ser correspondido la hembra emitirá sonidos al macho de su disponibilidad o simplemente se acercan para posteriormente ejecutar el acto, esto depende de la especie de delfín que sea.
Es normal que los machos peleen entre sí por la atención de una hembra, esto también lo pueden emplear como otra forma de lucirse en frente de ella y demostrar cual es el más fuerte Y tenaz del grupo.
Tanto el cortejo como el proceso de apareamiento suceden debajo del agua, al aceptar, el macho y la hembra juntan sus vientres, en ese momento el macho penetra a la hembra, el momento de la penetración dura solo algunos segundos, el macho puede repetir este proceso con la misma hembra todo un día, o ir en busca de otra hembra disponible para estos únicos fines, o como se ha mencionado anteriormente, su intención puede ser simplemente por placer.
La época de apareamiento suele variar, aunque la realidad es que por la parte de los machos, ellos pueden estar listo para el acto en cualquier momento del año, pero se ha comprobado que suelen hacerlo con más constancia entre primavera – verano, debido a la calidez de las agua, incluso muchos grupos de diferentes especies emigran para este propósito dirigiéndose a agua más calmadas y cálidas, esto lo hacen los delfines que viven en aguas más frías, los delfines de aguas más calientes pueden aparearse en cualquier momento del año ya que se ahorran el proceso de emigración.
Otro factor considerablemente importante también pudiera ser el proceso de ovulación de las hembras, pueden ovular más de 5 veces al año, aún no se tiene claro si la cantidad de veces que ovulan al año es igual en las hembras de todas las especies.
Se debe tener en cuenta que no es el mismo tiempo, proceso y forma para todos los delfines, ya que esto varía por especie, y lamentablemente no se han podido estudiar a todas las especies de delfines debido a los conservados que han sido con los humanos cuando se encuentran en su hábitat natural y comportamiento salvaje.
Tiempo de gestación
La gestación (variando la especie), puede durar de 10 – 12 meses, el bebé se desarrolla rodeado de placenta y conectado a su madre por un cordón umbilical, las hembras por el bien del desarrollo de su hijo, busca el mejor lugar para su nacimiento, emigran en grupo de delfines hacia aguas más cálidas, comen el doble o el triple de lo que solía comer anteriormente, debido a su embarazo ella me vuelve un poco débil, incluso para buscar comida, por lo que los demás miembros del grupo la ayudan en busca de su alimento, e incluso la priorizan en los momentos de escasez.
El macho se desentiende de la hembra y su hijo, por lo que ella viaja en compañía de otro grupo que se encarga de la seguridad y bienestar del bebé y la futura madre. La hembra al estar embarazada se vuelve más lenta al momento de nadar y moverse en el agua, por lo que la vuelve una presa muy fácil para sus depredadores naturales.
¿Cómo nacen los delfines?
El momento del parto tiene lugar en el agua, en donde la hembra estará rodeada de su grupo de delfines que la cuidaran en el momento que dé a luz, la hembra al momento del parto derrama mucha sangre, que es una de las grandes razones por la que los depredadores se podrían acerca producido por su aroma que se vuelve un delirio para ellos, y también debido al estado tan débil en el que se encuentra la hembra, volviéndola a ella y su cría un festín aún más fácil para sus depredadores.
Al momento de salir la cría lo hace de cola, ya que si lo hace de cabeza podría resultar en una gran asfixia y por consiguiente la muerte, algo admirable y que llama mucho la atención de este animal que no suele pasar comúnmente con los demás, es que las demás hembras del grupo toman el rol de parteras, ellas ayudan a la cría en su nacimiento, siendo de un gran apoyo para la madre que se agota en todo el proceso quedando sin fuerzas, el tiempo en promedio del parto puede durar entre 45 – 60 minutos, en algunos casos puede durar hasta más de dos horas,
Al salir la cría se corta el cordón umbilical, la madre ayuda a que su hijo nade hacia la superficie para que pueda tomar aire por primera vez, paren una cría por parto, hay casos muy particulares en los cuales nacieron dos crías, que suelen ser casos muy especiales y particulares, por los momentos no se ha registrado más cantidad de crías en los partos, dependiendo de la especie pueden pasar de 2 – 3 años para volver a tener una cría.
Crianza
Después de nacer, nadar y tomar aire por primera vez, se acercan a su madre para ser alimentado, la cría no requiere extraer la leche materna de su madre ya que ella por sí sola la expulsa, esto lo hace contrayendo el músculo, provocando que la leche salga de forma fluida sin mucho esfuerzo, la cría dependerá de este alimento por 1 – 2 años, la leche materna del delfín está compuesta de proteínas, grasas y diversos nutrientes que llena de energía a la cría, logrando su enorme y rápido crecimiento. Al nacer puede medir entre 1 – 1 ½ metros y pesar entre 30 – 40 kg.
Su madre lo protegerá y se encargará de su bienestar y desarrollo, ya que en este proceso no se separan el uno del otro, siendo la madre la que busca y provee la comida necesaria para ella y su cría la cual irá acostumbrando de a poco a la comida habitual de los delfines.
Mientras se desarrolla, el delfín aprende todo lo relacionado a conseguir alimento, su alimento se basa en pescados, calamares y moluscos porque son animales carnívoros. También aprenden a relacionarse con los demás delfines del grupo donde se encuentre y a desenvolverse por su propia cuenta sin ayuda de su madre, la cual de a poco dejará de acompañarlo para que pueda empezar a poner en práctica todo lo que está aprendiendo, cuando se encuentra solo recurre inmediatamente a otros delfines del grupo que también apoyan y aportan en su crecimiento y desarrollo.
En promedio el delfín se separa de su madre a los 6 años de edad, esto también podría variar por especie, algunas incluso se quedan un poco más de tiempo con ellas, al final, se separaran de sus madres por su despertar sexual, por lo que deberán irse para las temporadas de apareamiento, cortejar a la hembra y repetir el mismo ciclo hasta volver a procrear.
La información que se maneja sobre la reproducción de los delfines, aunque se podría decir que es suficiente, clara y precisa, ha dejado mucho que desear debido a que no se han podido estudiar a todas las especies en su hábitat natural en pleno estado salvaje, por lo que aún quedan muchas dudas existentes como por ejemplo, ¿qué tanta diferencia hay en el proceso de reproducción entre especies?, o ¿qué tanto puede cambiar entre proceso en estado salvaje y en cautividad?, se espera que pronto se pueda obtener más información sobre la reproducción de estos animal.
Una gran razón por la que el delfín despierta gran curiosidad sobre su proceso reproductivo se debe a el enorme nivel de inteligencia que posee, incluso de la información que se ha obtenido muchas personas han quedado asombradas debido al nivel de organización que ellos manejan, y como ellos protegen la vida de la madre y de su hijo en grupo
Este tipo de situaciones no se ve comúnmente en otros animales y especies, es algo sorprendente de gran impacto, el simple hecho de que incluso entre las hembras tomen el rol de parteras demuestra un alto nivel de desarrollo intelectual en estos animales.
Es importante saber más sobre su comportamiento, relaciones y proceso de reproducción en su hábitat natural debido a la gran libertad que gozan, pudiéndose decir que son ellos mismo, el cautiverio puede afectar la forma en la que se lleve a cabo el proceso reproductivo debido al entorno controlado en el que se encuentran, y al reducido espacio en el cual puedan nadar y hacer lo que quieran con la compañía que ellos deseen, su desenvolvimiento no es tan natural como pudiera ser en su estado salvaje.
Es un factor que ha llenado de intriga a muchas personas que tanto podrían cambiar los factores y proceso mediante la gran cuestión que es su hogar, ya que la crianza también es un cambio drástico al igual que la relación con los humanos, son animales amigables, pero a la vez muestran un gran grado de reserva sobre lo que es exponerse en todo tipo de comportamiento que podrían manifestar.
Gran parte de la información presentada, se ha debido a los estudios de expertos que han observado de los comportamientos de los delfines en cautividad, esto se debe a lo difícil que se ha vuelto para ellos observarlos en su estado salvaje, los delfines a pesar de ser sociables, carismáticos y alegres, han preferido mantenerse bajo perfil, por lo que se ha vuelto una dura tarea recopilar información de estos comportamientos, el delfín que más se ha podido estudiar en su hábitat natural ha sido el delfín nariz de botella, sin embargo, tampoco se ha podido descubrir mucho sobre esta especie en estado reproductivo.
Algo muy claro que nos ha dejado el delfín es que es un animal que disfruta plenamente de su sexualidad, demostrando que ellos no tienen como único fin el poder procrear más crías, ya que después de la copula con una hembra, busca más hembras, es un animal que responde a su instinto sexual al instante de llegar, el macho es el promotor de esto, llegando incluso a madurar sexualmente más rápido y siendo más activo que la hembra.
Es algo poco común ver como animales pueden llevar un estilo de vida sexual un poco parecido a los humanos, causando aún más intriga ya que el delfín es conocido por ser un animal muy inteligente, obteniendo un intelecto más alto que el promedio de otros animales.
La vida sexual de los delfines, muchos la comparan mucho con la vida sexual humana, debido a como se ha abarcado, aunque es repetitivo, para muchos les resulta fascinante el dominio de pensamiento y sentidos para poder relacionarse sexualmente con las hembras para poder producir placer y satisfacción, los fines de los animales en la época de reproducción es aparearse para poder fecundar crías, y aumentar su población, el delfín se atreve a aparearse sin necesidad obligatoria de tener descendencia, lo hagan o no ellos se desentenderán de ellas.
Se vuelven más carismáticos y galantes para poder tener el mayor éxito posible en la época de cortejo, a pesar de la gran unión entre los delfines, su única enemistad puede ser causada por competir por una hembra, de hecho varios de esta especie marina han sido encontrados con heridas y golpes en su cuerpo, debido a las peleas producidas que normalmente no suelen llegar a la muerte, pero si deja muy gravemente herido a los machos.
Los delfines son considerados por muchos como promiscuos, este animal ha diversificado su vida sexual y su forma de practicarlo, debido al gran placer que necesitan experimentar, al querer procrear vida, interactúan directamente con la hembra, y el acto lo hacen vientre con vientre, al querer tener sexo por placer y satisfacción practican diferentes posturas bajo el agua, igual la hembra no siempre quedara embarazada ya que eso hará efecto cuando ella este ovulando.
También es importante destacar que las hembras también sienten un gran placer sexual, ellas poseen un clítoris muy parecido al de las humanas, el cual se expande y se acopla al aparato reproductor masculino del macho, es importante no dejar por alto el papel de la hembra, ellas también tienden a aparearse por placer, su clítoris al contacto del pene les ofrece un enorme grado de estimulación, volviéndose más activas.
Un dato curioso, es que los en el momento de apareamiento debe existir un nivel de conexión muy fluido y natural el cual ayude al momento de la penetración, aunque el acto suceda bajo el agua, los delfines cuidan que el agua salada no entre en la matriz de la hembra, esto puede afectar al esperma, de modo tal que tenga un desarrollo no debido.
Los delfines han demostrado que cuando se trata de placer, no importa que o quien sea, ellos al momento de querer tener relaciones sexuales, pueden emitir sonido, hacer acrobacias, e incluso rozar con otras especies de animales marino, de hecho, mientras se estudiaba al delfín en cautiverio, se observó cómo se insinuaba y mandaba señales a los seres humanos que se encontraban a su alrededor, los cuales eran sus cuidadores o visitantes.
El delfín es un animal que demuestra libertad, simpatía e inteligencia, y que en cuestiones sexuales ha marcado diferencias con otros animales, ya que la disfruta a plena libertad tanto por gusto como por reproducir crías, un animal que referente a este tema ha impresionado a muchos.
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