En otoño solemos tener la casa más cerrada y nos gusta que el ambiente sea agradable. Si te gusta que tu hogar huela bien, hay olores muy otoñales que te pueden gustar. ¿Cómo hacer un ambientador casero? Es lo que vamos a abordar, con ingredientes de casa y con olores como la canela que invitan a la relajación.
Ahora echamos mano de los ambientadores que nos ofrecen en las tiendas, pero no hay que olvidar que muchos de ellos son artificiales. Hay varias formas de poder crear ambientadores caseros, desde ramilletes de hierbas aromáticas, con ambientadores caseros y aceites esenciales o hirviendo a fuego lento ingredientes otoñales, sobre todo realizados con ingredientes naturales. Veamos cómo son estos tipos de ambientadores y qué propuesta gusta más.
Ambientadores preparando una olla para cocinar
Se trata de un modo sencillo y muy tradicional, imagina que esta sería una de las formas que se utilizaban en nuestros antepasados y funcionaba de maravilla. Hay que llenar una olla de agua e ir incorporando frutas y especias. Entre ellas, podemos utilizar palitos de canela, clavos de olor, cáscaras de naranja o cítricos, hojas de pino, hojas de laurel, menta, manzana, lavanda o extractos de vainilla. Lo colocamos sobre el fuego y lo dejamos hervir a fuego lento.
Cómo hacer un ambientador casero con alcohol isopropílico
Este tipo de ambientadores dejará un aroma estupendo en el hogar, gracias a este tipo de alcohol que hará que se impregnen los aromas con mucha más eficacia. Se utiliza el alcohol isopropílico, es un compuesto mucho más puro, contiene hasta un 90% de pureza, ya que el etílico posee un 5% de agua.
La magia de estos ambientadores está en escoger los ingredientes que más gusten para tu hogar, con personalidad.
- Debemos de escoger un recipiente o base para recoger los ingredientes. Los ingredientes principales con agua y alcohol isopropílico, para ayudar a potenciar los aromas. ¿Proporciones? Es muy sencillo, por cada taza de agua que utilices añade una cucharada de alcohol.
- Utiliza una esencia de perfume que te guste, hay muchos aromas que huelen de maravilla, desde aromas a vainilla, cítricos, amaderados y otros. La medida exacta está en añadir unas gotas de esencia por cada taza.
- También puedes añadir cortezas pequeñas de frutas cítricas o de manzana. Otros ingredientes son hierbas frescas, como romero, pino o hojas de menta.
- Cuando tengamos nuestro ambientador lo cerramos. Lo guardamos en un lugar oscuro y esperamos a que se almacene por unos días, para que sus ingredientes se integren. Pasados unos días observaremos el olor que desprende. Lo podrás utilizar en pulverizadores, en bolsitas perfumadas, difusores o con piezas pequeñas de decoración de madera.
Ambientador casero con olor a otoño
Tenemos un ambientador casero hecho con ingredientes naturales y que se pueden encontrar dentro de nuestra despensa. Necesitamos cinco sencillos ingredientes:
- 1 manzana
- 1 naranja
- 3 ramas de canela
- 5 vasos de agua
Pasos para fabricar este estupendo ambientador:
- Preparamos una olla con los 5 vasos de agua.
- Cortamos la naranja y la manzana en rodajas y lo añadimos al agua. También agregamos las ramas de canela.
- Llevamos la olla a ebullición y tapamos. Cuando comience a hervir, apagamos el fuego y destapamos para que los vapores suelten el aroma.
- Podemos llevar la olla a alguna parte de la casa para que suelte este agradable aroma, por ejemplo encima de una estufa o radiador.
- También podemos introducir la mezcla en un tarro de cristal y añadimos unas gotas de alcohol. Otra idea es colocar unos palillos de ratán para que se desprenda el olor a través de la madera.
Otros ambientadores caseros que te apasionarán
Ambientadores florales
Este es otro de los ejemplos para realizar tu propio ambientador casero con el método de la olla. Se tiene que preparar una olla llena de agua a la que puedes añadir pétalos de flores o flores con deliciosas fragancias, lavanda, romero, menta o hierbabuena, con nuez moscada, un chorrito de anís, clavos de olor y palos de canela. Lo ponemos a hervir para que suelte ese aroma tan agradable.
Ambientador con aroma frutal
Llena una olla de agua y añadimos los siguientes ingredientes: clavos de olor, trozos de manzana, naranja, anís estrellado y palos de canela. Lo dejamos hervir a fuego lento y disfrutaremos del agradable olor que desprende.
Ambientador con nuestro suavizante preferido
Existen suavizantes para la ropa con aromas prácticos y que nos apasionan. Podemos disfrutar de nuestro olor preferido creando nuestro propio ambientador. Para ello necesitaremos:
- 100 ml de nuestro suavizante preferido
- 350 ml de agua
- 3 cucharadas de bicarbonato de sodio (opcional)
- 1 recipiente con función spray
En el mismo recipiente podemos ir agregando todos los ingredientes, si no tienes bicarbonato no importa. Cerramos y agitamos para hacer bien la mezcla. Lo utilizamos y observamos qué aroma nos aporta, si lo queremos más fuerte, podemos echar otro poquito más de suavizante.
Ambientador-pulverizador con olor a bosque
Preparamos un recipiente pulverizador, tipo spray. Lo llenamos de agua menos un dedo y agregamos 15 gotas de aceite esencial de lavanda, romero, tomillo, menta, eucalipto o limón. Después incorporamos una cucharada de alcohol de alta graduación. Mezclamos bien, dejamos reposar unas horas y lo utilizamos.
Ventajas de crear tu propio ambientador
Existen marcas y productos en el mercado con fragancias estupendas, pero seguro que no te has parado a pensar el potencial que tiene crear un ambientador con los aromas que te gustan. Muchas personas prefieren ofrecer a su ambiente un aroma sano, agradable y natural, como la frescura de los cítricos o la calidez que ofrecen las especias.
Además, con este tipo de ambientadores caseros, te liberas de posibles productos químicos que se esparcen en el ambiente y que a la larga pueden ser dañinos para la salud. Con los aromas naturales creamos nuestro propio ambientador con firma personal, utilizando aceites esenciales y hierbas, dándole un aroma fresco al ambiente.
Otra de las beneficios es la ventaja de utilizar nuestros propios recipientes, sin tener que tirar envases a la basura. Más ventajas es la utilización de las propias hierbas que tenemos cerca o que cultivamos en nuestro pequeño huerto, convirtiéndolo en una economía circular.