La Demodexia en los perros, es una enfermedad producida por un parásito que es un ácaro, tiene el nombre de demodex canis. Se trata de un ácaro que usualmente habita en la piel de los perros, quienes son los únicos que desarrollan la enfermedad cuando éstos tienen las defensas bajas. Si quieres saber más sobre esta dolencia, te invitamos a leer este artículo.
Demodexia Canina
Es una enfermedad parasitaria en los animales caninos, que se presenta en casos en los que el perro se encuentra viviendo situaciones tales como inmunosupresión, estados de estrés, cuando ha tenido un tratamiento muy prolongado con medicamentos del tipo corticoides o cuando ha sufrido una dolencia que disminuye las defensas del animal.
Desarrollo de la enfermedad
Cuando se presentan estas condiciones en el perro, este ácaro empieza a multiplicarse de forma exagerada propiciando que aparezcan lesiones en la piel del perro, que pueden ir desde una forma muy benigna en un lugar determinado, hasta una manera generalizada y grave, que usualmente se complica con bacterias, lo que origina también una piodermia que ocasiona una declinación progresiva en su salud. Este ácaro vive lo profundo del folículo piloso.
Tipos de Demodexia
Hay dos tipos de demodexia:
- Localizada: que se encuentra ubicada en una zona específica de la piel del animal, probablemente causada por una condición de estrés, lo que disminuye la función inmune del animal, pero usualmente se cura sola.
- Generalizada: se presenta en varias áreas de la piel del perro y por lo general es causada por una deficiencia específica de las células T, que son las que eliminan a los ácaros. Se tiene la creencia de que se trata de una enfermedad hereditaria, pero no hay seguridad acerca de cuál es el real mecanismo para que esto se transmita o se herede.
Transmisión
Se transmite de la madre a los neonatos lactantes, en los 2 o 3 primeros días de vida de los cachorritos. No existe contagio intrauterino, por lo que el contagio es debido al contacto.
Localización y presentación de la enfermedad
En el tipo de demodexia localizada, suele presentarse en áreas que exhiben una alopecia parcial y un eritema leve. Hay casos en los que se presenta el prurito y el área afectada puede encontrarse cubierta por escamas. El lugar más común en el que aparece es en la cara, hacia la zona periocular y las comisuras bucales, en los miembros posteriores, y en los oídos dando origen a una otitis ceruminosa bilateral. Es muy raro que se pueda observar este tipo de demodexia en una o varias zonas del tronco.
En el timo de demodexia generalizada, tal como el nombre lo hace pensar, puede presentarse esparcida por todo el cuerpo del perro y no se encuentra bien delimitada. Las lesiones que se producen por efecto de esta enfermedad, van pasando a peor con el transcurso del tiempo, y pueden encontrarse lesiones en la cabeza, el tronco, los miembros y el conducto auditivo.
Lo usual es que se compliquen con una piodermitis, por presencia de bacterias, lo que tiene como efecto la aparición de edemas, prurito y la formación de costras gruesas. En algunos perros pueden aparecer nódulos. Cuando la demodexia se vuelve crónica, las lesiones suelen tener costras, tener aspecto piógeno, son hemorrágicas y foliculares. El abdomen del perro siempre será la zona menos afectada y ello se debe a que es el área en la que menor cantidad de folículos pilosos hay.
Existe una tercera posibilidad que es la pododermatitis demodectica. Tal como lo hace pensar su nomenclatura, se localiza en las áreas de las plantas y patas. La mala noticia es que este específico tipo de dolencia es muy resistente a los tratamientos que son habituales y es muy estresante por el dolor que le provoca a los perros, sobre todo en los que son de raza grande.
Diagnóstico
Para que el diagnóstico pueda efectuarse, es necesario que el veterinario realice un raspado de piel en el perro. La presencia de un solo ácaro, huevo, larva o ninfa, es el indicador positivo de nuestra mascota tiene esa enfermedad. En casos extremos, también se podrá diagnosticar por medio de biopsias de piel. En estos casos, lo primero que se deben descartar son las siguientes dolencias:
- Piodermias generalizadas
- Celulitis juvenil
- Micosis
- Impétigo canino
- Lupus
Tratamiento
El tratamiento de la forma local y tópica es elegido por el veterinario de nuestra confianza, pero recordemos que en los casos leves, esta enfermedad tiende a desaparecer por sí sola. En un lapso de un mes el pelo volverá a crecer normalmente.
Pero cuando se trata de la demodexia generalizada, hay que aplicar un tratamiento que es muy prolongado y que, usualmente, con lleva baños con shampúes antisépticos, antibióticos, y una medicación adicional que tiene como finalidad acabar de manera sistémica o localizada a los ácaros. Se sabe que el perro se ha curado, cuando se le han efectuado dos 2 raspados de piel que han dado negativo, con un intervalo de 15 días.
Pronóstico
El pronóstico del tipo de la demodexia localizada suele ser de leve a mejor. En el caso de la que es generalizada, el pronóstico es de moderado a grave, en función del grado de infección que tenga nuestro perro.
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