Bronquitis crónica. Síntomas, causas y tratamiento

bronquitis

La bronquitis crónica es una inflamación persistente de la membrana mucosa que recubre los bronquios. Está relacionada principalmente con la inhalación de sustancias irritantes y nocivas, como el humo del cigarrillo, los gases y los contaminantes atmosféricos.

La patología suele manifestarse con tos productiva (es decir, con expectoración de mucosidad). A veces va asociada a dificultad respiratoria.

La bronquitis crónica se caracteriza por la tendencia a evolucionar progresivamente y las agudizaciones de los episodios inflamatorios por la presencia de diversos factores exacerbantes, entre los que se encuentran los cambios bruscos de temperatura, las alergias respiratorias y la exposición a agentes infecciosos.La bronquitis crónica se puede tratar con medicamentos o terapias de apoyo, como el entrenamiento de los músculos respiratorios y la administración de oxígeno.

¿Qué se entiende por Bronquitis Crónica?

La bronquitis crónica es una inflamación persistente de los bronquios, es decir, las ramas del árbol respiratorio que parten de la tráquea y alcanzan el interior de los pulmones.

El factor que más predispone a la bronquitis crónica es el humo del cigarrillo, pero también la contaminación del aire y la exposición prolongada a agentes inhalatorios irritantes, químicos o físicos, que favorecen el mantenimiento de la inflamación.

Bronquios

Los bronquios son las dos ramas terminales de la tráquea (canal cilíndrico de tejido fibroso elástico, situado en el centro del tórax) que penetran en los pulmones, situados en la cavidad torácica. Inicialmente, los bronquios tienen un diámetro bastante grande. A medida que vamos bajando se ramifican en canales cada vez más pequeños (bronquiolos).

bronquitis tabaco

Bronquitis crónica y aguda: ¿cuáles son las diferencias?

La bronquitis crónica difiere de la forma aguda por varias razones. En primer lugar, para definirse como crónica, los síntomas de la inflamación bronquial deben estar presentes durante al menos tres meses en dos años. No tienen porqué ser meses consecutivos.

Es más:

  • Bronquitis crónica:
    • Resulta de la exposición repetida a factores irritantes, el más importante de los cuales es el tabaco.
    • Si no se trata adecuadamente, con los años puede evolucionar a formas más graves, como la EPOC.
  • Bronquitis aguda:
    • Es una inflamación principalmente de origen infeccioso (generalmente, es una complicación del resfriado común o la gripe ).
    • Si se maneja de la manera correcta, tiende a curarse en poco tiempo, sin dejar secuelas.

Causas y factores de riesgo

Qué sucede en presencia de Bronquitis Crónica

El proceso inflamatorio en el origen de la bronquitis crónica predispone a la hipertrofia (es decir, a un mayor desarrollo patológico) de las glándulas secretoras de moco, situadas en la pared de los bronquios, de lo que se derivan dos efectos:

  1. Hipersecreción de moco: al aumentar el volumen y la actividad de las células que producen las secreciones mucosas, esta última es más difícil de eliminar y tiende a estancarse, volviéndose más viscosa.
  2. Engrosamiento de las paredes de los bronquios por contracción de las pequeñas células musculares que los rodean o por acumulación excesiva de mucosidad, con:
    • Reducción de los cilios vibrantes que recubren las mucosas de las vías respiratorias, en términos numéricos y funcionales. (Nota: estas estructuras, con su movimiento ondulante, favorecen la expulsión de cuerpos extraños del árbol bronquial).
    • Limitación del flujo de aire: en presencia de bronquitis crónica, se dificulta la entrada y salida de aire de las vías respiratorias estrechadas.

Sabías que…

Un catarro es un tipo de mucosidad que se desarrolla durante un proceso inflamatorio. Esta secreción es producida por glándulas adheridas a la membrana mucosa de las vías respiratorias. A diferencia de la mucosidad secretada en condiciones fisiológicas normales, que tiene la función de lubricar las paredes y facilitar la eliminación de los agentes externos que penetran en el organismo, la flema es más abundante, espesa y pegajosa.

Bronquitis crónica: ¿cuáles son las principales causas?

La bronquitis crónica es el resultado de una combinación de varios factores ambientales y de comportamiento.

La causa más importante de la bronquitis crónica es el humo del tabaco, especialmente el del cigarrillo, que acelera y acentúa el deterioro natural de la función respiratoria.

Otros factores también hacen que la inflamación crónica de los bronquios sea más probable, como:

  • Humo pasivo (promueve la inhalación de gases y partículas).
  • Exposición a partículas, humos y vapores irritantes, polvos y sustancias químicas, tanto en el hogar como en el lugar de trabajo (por ejemplo: sílice o cadmio, gases y productos de combustión de combustibles para cocinar o calentar).
  • Contaminación del aire (smog y partículas ambientales finas, emisiones de vehículos a motor, estufas, sistemas de aire acondicionado, etc.).

Algunas personas también parecen tener una predisposición natural a la bronquitis crónica, como:

  • Inmunosupresión.
  • Infecciones de las vías respiratorias contraídas en la primera infancia (especialmente si son recurrentes, especialmente graves y/o capaces de influir negativamente en el desarrollo del árbol respiratorio), como:
    • bronquiolitis;
    • bronquitis aguda;
    • neumonía;
    • pleuritis.
  • Antecedentes personales positivos o familiaridad con:
    • alergias;
    • asma;
    • otras patologías respiratorias.

bronquitis polución

Síntomas de la bronquitis crónica

Desde el punto de vista clínico, la bronquitis crónica se define por la presencia de tos productiva (que se acompaña de producción excesiva de mucosidad y expectoración de la misma), durante al menos 3 o más meses al año, durante 2 años consecutivos.

La tos persistente puede estar asociada con disnea, descrita como un mayor esfuerzo para respirar o sibilancias durante el esfuerzo físico, incluso modesto (p. ej., caminar). En la bronquitis crónica, el esputo puede ser extremadamente espeso y difícil de eliminar.

Episodios inflamatorios

En el contexto de la bronquitis crónica, la recurrencia de los episodios inflamatorios es un evento repentino, generalmente causado por irritantes inhalados o por una causa infecciosa. Los brotes de inflamación bronquial provocan un rápido empeoramiento de los síntomas respiratorios (sibilancias, opresión en el pecho, dolor en el pecho, fatiga y malestar general). En algunos casos, esta condición puede ser una emergencia médica.

Bronquitis Crónica: Formas

Bronquitis crónica simple

La bronquitis crónica simple se manifiesta únicamente por tos y secreción excesiva de moco.

Bronquitis crónica mucopurulenta

La bronquitis crónica mucopurulenta se caracteriza por la recurrencia de episodios infecciosos respiratorios, favorecidos por la persistencia de moco espeso y viscoso (sustrato ideal para la colonización de patógenos), a nivel de los bronquios. En esta forma de la patología, el esputo parece purulento.

Complicaciones y trastornos asociados

Posibles complicaciones de la bronquitis crónica

En algunos casos, si se descuida y se prolonga en el tiempo, la bronquitis crónica tiende a evolucionar progresivamente, dando lugar a una limitación del flujo aéreo, que se vuelve cada vez más marcada y dificulta la respiración, incluso tras pequeños esfuerzos.

Este cuadro clínico se ve agravado por la mayor susceptibilidad a infecciones respiratorias de origen viral, bacteriano o fúngico. Estos tienden a curarse lentamente y pueden causar recaídas acompañadas de síntomas agravados. A medida que avanza la bronquitis crónica, estos episodios tienden a ser más frecuentes y pueden inducir una importante respuesta inflamatoria.

La inflamación también puede afectar al pulmón, predisponiendo a la aparición de otras condiciones patológicas, que no son del todo reversibles, como:

  • bronconeumonía;
  • enfisema;
  • enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

¡Toma nota! La tos crónica y la expectoración típicas de la bronquitis crónica pueden preceder a la limitación del flujo de aire por muchos años. En caso de dificultades respiratorias y aumento de la frecuencia de enfermedades típicamente invernales (resfriados, gripe y faringitis), se recomienda consultar al médico.

bronquitis oxígeno

Diagnóstico

¿Cómo se hace el diagnóstico de Bronquitis Crónica?

El diagnóstico de bronquitis crónica lo establece el médico general o neumólogo de referencia en base a:

  • Anamnesis: implica la recopilación de datos e información que pueden ser útiles para formular el diagnóstico final (por ejemplo, hábito de fumar o presencia de otros factores de riesgo, calidad de la respiración, frecuencia de episodios inflamatorios sintomáticos, etc.);
  • Examen objetivo: la auscultación de los bronquios y los pulmones con el estetoscopio confirma la presencia de algunos signos característicos del cuadro clínico.

Investigaciones instrumentales y otras pruebas.

Además de la exploración médica, puede ser necesaria la realización de una radiografía de tórax, en la que se pone de manifiesto el estado inflamatorio de los bronquios. Esta última situación también se puede evaluar con una broncoscopia.

La espirometría permite determinar el daño a la función respiratoria secundario a la bronquitis crónica. De hecho, el test permite medir la cantidad de aire que llega a los pulmones con cada inspiración y cuánto se expulsa con la espiración, además de establecer el tiempo que tarda en completarse el acto respiratorio completo.

Tratamiento y Remedios

El objetivo del tratamiento de la bronquitis crónica es limitar las exacerbaciones y, lo que es más importante, evitar que la enfermedad progrese. En el caso de la EPOC actualmente no existe una cura eficaz que permita restablecer la función respiratoria perdida.

En cualquier caso, la estrategia terapéutica más adecuada debe tener siempre en consideración las indicaciones individuales establecidas por el médico, formuladas en relación con la extensión del trastorno, los síntomas y las necesidades personales del paciente.

Bronquitis crónica: ¿qué tratamiento se prevé?

En primer lugar, el abordaje correcto de la bronquitis crónica pasa por eliminar las causas que la provocan, como el tabaquismo y la exposición a contaminantes.

Para aliviar los síntomas y facilitar la curación, la terapia de apoyo incluye una hidratación adecuada combinada con reposo. Beber mucho favorece la fluidificación de las secreciones mucosas.

En cuanto a los medicamentos para la bronquitis crónica, elmédico puede recetar broncodilatadores inhalados. Estos medicamentos ayudan a que los músculos de los bronquios se relajen y favorecen el paso del aire, mejorando la capacidad respiratoria. La mayor efectividad se obtiene con una intervención temprana y un seguimiento regular de la terapia.

Otros fármacos que podrían estar indicados son los expectorantes, que diluyen la mucosidad, facilitando su eliminación, en caso de que sea difícil expulsarla con la tos.

En algunos casos, la bronquitis crónica puede requerir hospitalización, para manejar cualquier problema, por ejemplo, con oxigenoterapia, ventilación mecánica no invasiva (con mascarilla facial) y nutrición parenteral. Los medicamentos utilizados principalmente a nivel hospitalario pueden incluir corticosteroides sistémicos (tabletas o por vía intravenosa), antibióticos (si es necesario, es decir, en presencia de infecciones bacterianas concurrentes) y mucolíticos.

Prevención

Bronquitis crónica: algunos consejos

  • Para prevenir la aparición y evolución de la bronquitis crónica, es de fundamental importancia reducir la exposición global al humo del tabaco, el polvo en el lugar de trabajo y la contaminación interior y exterior.
  • Para prevenir las exacerbaciones, se recomienda a los pacientes con bronquitis crónica que se vacunen periódicamente contra la gripe y la neumonía neumocócica. De hecho, estas enfermedades infecciosas podrían agravar la función respiratoria ya comprometida.

En la vida cotidiana, los pacientes con bronquitis crónica pueden beneficiarse de algunas precauciones:

  • Mantener la habitación en la que estemos bien ventilada (en los días en que el aire está muy contaminado, en cambio, es recomendable permanecer en el interior, con las ventanas cerradas).
  • Evitar el humo de cigarrillo activo y pasivo.
  • Controlar el peso, para no forzar más el sistema respiratorio.
  • Practica runa serie de ejercicios específicos para mantener activos los músculos respiratorios y mejorar la tolerancia al esfuerzo.

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